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    Empacado de alimentos: ése sí es un empaque

    Los impactos ambientales, las preocupaciones por los costos y los avances tecnológicos impulsan el deseo por la innovación en el envasado y empacado de alimentos.

    Desde los empaques de alimentos fabricados con almidón de maíz y recubrimientos a base de plantas que extienden la frescura de la fruta hasta las botellas de licor hechas de papel, los empaques de alimentos y bebidas tradicionales se están sometiendo a una revisión.

    Numerosas iniciativas en Estados Unidos y Europa financian el trabajo en plásticos alternativos”, comenta Carson Meredith, director ejecutivo del Renewable Bioproducts Institute y profesor del Instituto de Tecnología de Georgia.

    Detrás de esta innovación hay un reconocimiento creciente de que la conveniencia de los empaques desechables tradicionales impone costos medioambientales y económicos importantes.

    Los empaques desechables se basan en la extracción continua de materias primas limitadas para mantenerse al día con la demanda del mercado”, señala Bridget Croke, directora general de Closed Loop Partners, una firma de inversión con sede en Nueva York centrada en la creación de una economía circular. Esto degrada los ecosistemas y emite gases de efecto invernadero.

    Además, debido a que los materiales se desechan en lugar de recuperarlos al final de su uso, su valor económico también se desperdicia. Las tarifas y los procesos de eliminación también añaden costos.

    La creciente preocupación de los consumidores por el impacto ambiental de los empaques y envases de alimentos y bebidas también influye. Las principales preocupaciones de los consumidores sobre el empacado de alimentos son, comprensiblemente, la higiene y la seguridad, según una encuesta reciente de McKinsey & Company (ver cuadro de la página siguiente). Al mismo tiempo, el 55% de los encuestados indica que está extremadamente o muy preocupados por el impacto medioambiental de los empaques y envases.

    Los avances tecnológicos también afectan. “La tecnología cambia las reglas del juego al permitir más oportunidades de reutilización”, asegura Tim Debus, presidente y director ejecutivo de Reusable Packaging Association.

    Un ejemplo proviene de RM2, que incorpora la tecnología de sensores de Internet de las cosas (IoT) en sus pallets compuestos. Los sensores capturan y transmiten la ubicación, la temperatura y los eventos de impacto e inclinación de cada pallet.

    El gigante de las bebidas Bacardi está desarrollando lo que llama la botella de bebidas espiritosas más sustentable del mundo, la cual reemplazará a 80 millones de botellas de plástico cada año.

    “Los clientes saben exactamente dónde están sus pallets y productos, a qué temperatura están sometidos, si ocurrió algún evento que causó daños, y cuándo y dónde sucedió esto, en tiempo real”, comenta Mark Gordon, vicepresidente senior de desarrollo comercial de RM2.

    La tecnología de sensores es menos costosa y más fácil de usar que la combinación de rastreadores de ubicación, sensores de temperatura y vibración, y acelerómetros que de otro modo serían necesarios para capturar la misma cantidad de datos.

    Liviri Fresh es una caja de envío en frío reutilizable que mantiene en refrigeración los productos perecederos electrónicos sensibles a la temperatura durante el envío terrestre desde la instalación de distribución hasta la puerta principal del consumidor.

    Empaques reutilizables

    La innovación facilita la reutilización de los empaques de alimentos. Por ejemplo, OZZI ha desarrollado un sistema de circuito cerrado de empaques de comida reutilizables junto con un sistema de recolección patentado.

    Los empaques de color verde brillante de OZZI tienen la misma forma básica que muchos empaques de poliestireno para llevar. Sin embargo, están hechos de plástico sin Bisfenol A que se puede limpiar y reutilizar cientos de veces y luego reciclar, explica Tom Wright, director ejecutivo de la firma, con sede en North Kingstown, Rhode Island. Tan importante como los propios empaques es la solución de recolección. Para que los reutilizables funcionen, se requiere un sistema de recolección “fácil de usar”, advierte Wright.

    Con el sistema OZZI, denominado O2GO, los comensales toman prestados sus empaques, disfrutan de su comida y luego los devuelven a una máquina de recolección que se parece a una máquina expendedora. Por lo general, estas máquinas se encuentran en varios lugares dentro de una instalación o campus. Cuando las máquinas se llenan, alertan al personal, que luego puede vaciarlas y llevarse los empaques para su limpieza. OZZI promedia una tasa de devolución de alrededor del 98%, asegura Wright.

    La compañía lanzó su solución en campus universitarios y desde entonces se ha expandido a otros entornos tipo campus, incluidos los centros de atención médica, los centros para personas mayores y edificios de oficinas.

    Otra empresa, Returnity Innovations, con sede en Brooklyn, Nueva York, se centra en empaques reutilizables para entregas de comercio electrónico. La compañía ha desarrollado soluciones de empaque para otros productos, incluyendo ropa y muebles, y está trabajando en soluciones para empresas de alimentos y bebidas, comparte el director ejecutivo Mike Newman.

    ¿Qué importancia tiene el empacado de productos en todo el mundo?

    % de encuestados que indican “Extremadamente” o “Muy importante”

    En una encuesta que analiza lo que los consumidores estadounidenses esperan del empacado de los productos, McKinsey encuentra que la higiene y la seguridad alimentaria, la caducidad y la facilidad de uso son los factores clasificados como más importantes.

    El impacto ambiental es el menos importante de los siete, después de la durabilidad y la apariencia. El cuarenta y tres por ciento de los consumidores estadounidenses encuestados citan el impacto ambiental del empacado como extremadamente o muy importante, en comparación con el 77% que conceden la mayor importancia a la higiene y la seguridad alimentaria, el 67% a la caducidad y el 61% a la facilidad de uso.

    La importancia relativamente baja que los consumidores estadounidenses atribuyen a los factores ambientales no es única; la encuesta de McKinsey revela opiniones parecidas en China, Francia y el Reino Unido.

    Cada solución se adapta a la empresa y al producto, y sigue lo que Newman llama el marco “3P”:

    1. Proceso. ¿Qué proceso se utilizará para recuperar el empaque? Debería ser fácil y de bajo costo.

    “Lo más importante para las empresas que buscan productos reutilizables es el costo de devolución del empaque”, expone Newman. Si el modelo logístico existente de una empresa no incluye la devolución del empaque, agregar esta función puede imponer un nuevo gasto significativo.

    “Hay formas de hacer que los costos de devolución sean lo suficientemente bajos, pero debe empezar a partir de ese punto a integrar un proceso de devoluciones eficiente o no escalará”, añade. Un proceso de devoluciones que se incorpora como una ocurrencia tardía probablemente será más difícil de escalar.

    Las etiquetas adheribles StixFresh de quitar y pegar son una forma totalmente natural de extender la caducidad de las manzanas, peras, aguacates, mangos, naranjas y otras frutas cítricas hasta por 14 días.

    2. Participación. ¿Cómo puede atraer al cliente para que lo siga? Por ejemplo, ¿los consumidores pueden devolver sus empaques en el mismo lugar donde hacen otras devoluciones?

    3. Embalaje (packing). Por último, ¿qué empaque cumplirá con los requisitos identificados en los dos pasos anteriores?

    Por lo general, los empaques de Returnity usan tela, a menudo fabricada a partir de botellas recicladas, en lugar de molduras de plástico. Una razón: la tela suele ser más rentable en pequeñas cantidades. También tiende a funcionar mejor para los artículos que no se apilan en pallets, sino que se transportan en una bolsa de mensajero para bicicletas.

    Cualquier paquete de comercio electrónico también tiene que “ganar la experiencia del umbral de la puerta”, señala Newman. Con las compras en línea, el paquete suele ser la única conexión física entre la empresa y el consumidor, agrega. Necesita crear una impresión favorable.

    El Liviri Shuttle, diseñado para servicios de entrega de comestibles locales, es liviano, aislado y reutilizable, dice el portavoz Logan Martínez. Debido a que el Shuttle puede mantener los productos perecederos en una zona de temperatura segura durante más de 12 horas, hace posibles las entregas sin supervisión, lo que aumenta la eficiencia de la ruta.

    Después de recibir un envío, los consumidores simplemente sacan sus productos perecederos de la caja, cierran la tapa, colocan la etiqueta de envío de devolución incluida para su recolección y la devuelven por FedEx u otro servicio de mensajería.

    Por Karen Kroll

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    *Nota del editor: Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Inmobiliare.

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