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    Espacios para trabajo remoto como top demanda

    La oferta de espacios en oficina fue cambiando, evolucionando y modificándose en los últimos años. Vimos que los desarrollos o edificaciones dedicadas a un solo corporativo, coworkings y el subarrendamiento de oficinas, fueron algunas de las tendencias que, independientemente de la coyuntura, resultaban en un buen esquema de negocio o cumplían con las necesidades del momento.

    Así como se fueron modificando las zonas laborales acorde a los requerimientos y escalabilidad de los negocios, también se viven algunas evoluciones dentro de la vivienda para adaptarse de mejor manera a la nueva cultura colaborativa en distintas latitudes.

    Derivado de la situación sanitaria, la mayoría de las empresas tuvieron que implementar el trabajo remoto, esto implicó un gran reto para la población y más si se combinaba con actividades escolares a distancia. Cabe resaltar que la vivienda no estaba preparada para desempeñar estas funciones, por decirlo de alguna manera, y el reto en cuestiones de adaptabilidad fue sustancial.

    La invasión de espacios como recámara, sala o comedor fue una necesidad para sortear la situación, sin embargo, no estaban diseñados con esa finalidad y las complicaciones comenzaron a presentarse. Desde el desgaste natural del mobiliario hasta inversiones en sillas ergonómicas o escritorios que pudieran aliviar este momento en específico.

    Previo a esto, las amenidades que más se buscaban en los complejos eran albercas, salones de usos múltiples y otras más que no involucraban actividades al aire libre o en su defecto espacios para colaborar. Ante la inminente ola de personas que se acercaron al trabajo remoto, algunos desarrolladores comenzaron a transformar y realizar modificaciones en el trazado del plano del inmueble para dar espacio a pequeños cubículos o salas de juntas y otro tipo de comodidades que permitieran laborar sin salir del complejo habitacional.

    Hay que resaltar que los hogares no estaban pensados para ejercer una actividad laboral y por ende las complejidades desde la iluminación, ruido, distribución y más representaron un gran reto para los poseedores de un hogar.

    Hoy, luego del aprendizaje obtenido con el pasar de los meses y analizando los hábitos de consumo, vivienda, data y más, algunos complejos se han enfocado a desarrollar amenidades dentro de los desarrollos que permitan contar con todas las facilidades y comodidades para desempeñar el trabajo cotidiano como si fuera una oficina.

    Vemos desarrollos inmobiliarios en México como Amaia en Mérida o Ki Green District en Nuevo Vallarta, que han puesto el ejemplo o el dedo sobre el renglón, teniendo un alta escucha de los usuarios y haciendo caso a las búsquedas de los nuevos compradores de vivienda; los cuales, dentro de sus preferencias para realizar una inversión inmobiliaria, buscan inmuebles o complejos que cuenten con espacios pensados y diseñados para el trabajo remoto. Estas características se han convertido en algo esencial y que incentiva positivamente la compra.

    Socialmente, se experimentó un cambio de mentalidad en toda la generación económicamente activa, se hicieron a la idea y se adaptaron a colaborar desde su hogar, lo que implicó un cambio en las necesidades. Las personas, además de buscar los espacios laborales, también hicieron suya la tendencia del diseño biofílico, que simplemente es integrar aspectos de la naturaleza en la edificación de la vivienda. Las terrazas, balcones o cualquier espacio abierto con gran ventilación seguirán tomando fuerza y veremos complejos habitacionales dirigidos hacia ese nicho.

    La escucha permanente de los usuarios y las decisiones basadas en datos, siempre arrojará buenos dividendos, desarrollar nuevos modelos de vivienda, con características especiales no está peleado con la rentabilidad, hay que recordar que existen presupuestos para todas las necesidades, segmentos poblacionales e incluso nacionalidades.

    El trabajo remoto o híbrido llegó y no desaparecerá, como industria debemos adaptarnos y tener la suficiente capacidad de modificar el plan inicial sin afectar las finanzas o encarecer las unidades. El universo inmobiliario nos brinda una gama infinita de posibilidades, somos parte de la historia de cada persona y aliviamos una de sus necesidades básicas como lo es tener un techo donde vivir.

    Por Alohome

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    *Nota del editor: Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Inmobiliare.

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