En los últimos meses se ha podido observar mayor interés en la adopción de soluciones tecnológicas que permitan hacer frente a los desafíos de la crisis sanitaria. De acuerdo con el Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés), el mundo ha vivido una adopción acelerada, implementando 10 años de transformación digital, en tan sólo tres meses.
La tecnología juega ahora un papel más activo en la optimización de aspectos del día a día de las personas, como la salud, el trabajo, la economía y la movilidad. Y justamente estos últimos rubros son considerados como fundamentales para la resiliencia y recuperación de las ciudades.
Eugene Zapata, Managing Director de Latinoamérica y El Caribe de la Red Global de Ciudades Resilientes, señaló durante su intervención en el podcast Americas Quarterly, que en los años recientes los países latinoamericanos han vivido un fuerte proceso de urbanización, en el que hay una constante migración poblacional hacia las zonas urbanas, debido a que son fuente de empleo y servicios.
Lo anterior ha hecho que las ciudades y sus problemas crezcan, sin embargo, la llegada de la pandemia presenta una gran oportunidad para mejorar diversos aspectos, uno de ellos es la transformación de la movilidad urbana.
Aida Esteban Millet, Senior Director en Visa de Movilidad Urbana en Ciudades Inteligentes de Latinoamérica y El Caribe, considera que para cumplir con el distanciamiento social requerido para evitar contagios, la economía digital y su implementación en los sistemas de transporte urbano es la clave.
La Directora regional destacó durante su participación en el webinar “Digital Technology”, de la Red Global de Ciudades Resilientes, que uno de los fenómenos que pudieron apreciarse a partir del confinamiento, fue que el e-commerce aceleró su crecimiento de tres años, en tan menos de cuatro meses. Esto influyó asimismo, en el incremento del uso de métodos de pago sin contacto (contactless) o de bajo contacto (low-touch) y puso de relieve que pueden ser utilizados en otros rubros.
“Esta manera de pago es definitivamente la más rápida y segura en el contexto actual, ya que no requiere de contacto físico con nada ni nadie”, detalló. “En Visa hemos observado que en promedio global, el uso de estos métodos ha ascendido en un 20%”.
Millet comentó que los pagos digitales son fundamentales para la recuperación económica en un contexto con limitaciones físicas como el actual. Por su parte, Eugene Zapata mencionó que estamos a punto de usar cada vez menos el dinero en efectivo, lo que será un impacto grande en las ciudades, y puede ser una gran oportunidad para los gobiernos locales para generar un panorama más claro y transparente sobre los impuestos, la economía informal y la corrupción.
Por esta razón, Visa colabora con 50 millones de empresas pequeñas y medianas para incluirlas en el programa “Back to business”, que consiste en una herramienta online en la que consumidores y comerciantes pueden tener acceso a información sobre los negocios locales, y hacer pagos sin efectivo.
A la par, están participando en iniciativas gubernamentales en la región de LATAM, para guiarlos en el proceso hacia una economía más digital, que además de segura, sea incluyente con las poblaciones más vulnerables. Tal es el caso de República Dominicana, en donde en conjunto con las autoridades, habilitaron las credenciales de identificación personal como tarjetas de pago, para que todas las personas pudieran acceder a su dinero y a los subsidios otorgados por el gobierno, de manera sencilla y sin riesgos.
Por otro lado, y debido a la importancia que tiene la movilidad, Visa participa en colaboración con la Red Global de Ciudades Resilientes en más de 500 proyectos en la región, para habilitar y expandir el uso de métodos de pago contactless en los sistemas de transporte público. Con esto, además de reducir el riesgo de contagio, se puede mejorar la agilidad del servicio pues no se requieren filas de recarga, además de impulsar la inclusión de toda la población en la transformación digital, explicó Millet.
En este sentido, la especialista mencionó que las ciudades brasileñas de Sao Paulo y Río de Janeiro, han sido las primeras en América Latina en incluir ese modelo de manera exitosa. República Dominicana fue el segundo en digitalizar su movilidad, y los usuarios del transporte ahora pueden pagar con tarjetas de cualquier banco que opere en ese país, gracias a que se habilitó un sistema abierto para la red de movilidad.
Asimismo, han lanzado la iniciativa de ciudades inteligentes con la que buscan ofrecer a los países latinoamericanos, oportunidades para migrar a una economía e infraestructura digitales de calidad, para que sean más resilientes ante crisis como la actual.