Al cierre del primer semestre del año, el mercado corporativo aún percibe las consecuencias de la pandemia y continua con indicadores negativos y niveles históricos de desocupación. Sin embargo, algunos expertos advierten que la recuperación del sector, aunque lenta, ha iniciado.
En entrevista para Inmobiliare, Iván Solano, director del sector de oficinas de Newmark, señala que es innegable que las desocupaciones han lastimado a los mercados corporativos de manera importante durante la pandemia. En el caso de Ciudad de México, este abandono de espacios de trabajo es aún más notable ya que se trata de la fracción corporativa más grande de Latinoamérica.
Aunque las condiciones sanitarias fueron uno de los factores que detonaron la crisis, este no es un fenómeno exclusivo de esta etapa. De acuerdo con el informe de Newmark, durante el semestre previo al inicio del confinamiento (2T2019) la superficie desocupada fue de casi 140 mil metros cuadrados, una cifra ya elevada.
Mientras que, en los trimestres iniciales de la emergencia sanitaria (1T20 y 2T20) las desocupaciones ascendieron a más de 173 mil metros cuadrados, número que representó un aumento del 23.5% respecto al semestre anterior.
Para el segundo semestre de 2020 y el primer semestre de 2021, la desocupación aumentó a 198 mil 657 y 320 mil 116 metros cuadrados, respectivamente. Esta última cifra dejó un crecimiento del 128% comparado con el último trimestre “sano” que se vio en la capital.
Por otra parte, el decremento de las absorciones brutas a lo largo de este período ha sido extraordinario. Aunque el inventario se incrementó de manera marginal durante el período (0.53%), la tasa de disponibilidad alcanzó su máximo histórico con 22.49%, para llegar a casi 1.7 millones de metros cuadrados desocupados. Lo que dejó una absorción neta de -81 mil 354 metros cuadrados.
“Si bien hemos visto que en una época “sana” para el mercado las desocupaciones son considerables, estas son mimetizadas por el ciclo natural de la absorción de estos espacios, pues en una economía sana y bajo condiciones normales, se crece trimestre con trimestre y, con ella, nuevas empresas necesitan de estos espacios o las ya consolidadas buscan la ampliación de sus operaciones”, explica Solano.
Adaptabilidad al nuevo modelo corporativo
Esta dinámica se vio detenida luego de que la caída en la economía nacional provocó una incertidumbre generalizada. En la que múltiples compañías vieron sus flujos comprometidos y decidieron desocupar espacios por vencimientos de contratos. Así, las más resilientes se adaptaron a las nuevas modalidades de trabajo.
Con estos indicadores, es evidente la sobreoferta generalizada en los diferentes corredores de la CDMX. Según datos de Newmark, Bosques y Lomas Palmas son los submercados menos preocupantes. En conjunto, únicamente contribuyen con el 9% del área disponible; además, la superficie en construcción dentro de estos no rebasa los 100 mil metros cuadrados.
Caso contrario al de los corredores Norte, Santa Fe e Insurgentes, que sumados representan más del 56% del área neta rentable desocupada de toda la ciudad. Asimismo, se tiene registro de una extensión en construcción de 375 mil metros cuadrados, casi el 5% del inventario actual de toda la ciudad.
Este es un artículo de la edición 128 https://inmobiliare.com/inmobiliare_v2/inmobiliare-128/