Construyendo opciones para la Ciudad de México

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La ciudad de México pasa por un proceso de transformación importante, pero no sólo en cuanto a las construcciones, sino en la cultura de los ciudadanos que forman parte de esta gran capital, de acuerdo con Felipe de Jesús Gutiérrez, titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de Distrito Federal (Seduvi), quien destacó que hoy existen 52 zonas metropolitanas en el país. En algunas estimaciones hechas hace años se prospectaba que para inicios del año 2000 habría 40 millones de habitantes, sin embargo, hay 21 millones.

Captura de pantalla (391)En el panel “Constitución de ciudad: Reconstrucción del marco normativo” en Expo Inversión Inmobiliaria, los especialistas coincidieron en que las ciudades deben ser vistas como una solución a la vida de los seres humanos y no como un problema, por lo que debe existir la capacidad para reconvertirlas. Un punto importante es revisar la normatividad que sigue vigente desde hace muchos años y que ya no representa una solución a las necesidades actuales.

Al respecto, José Luis Cortés, de Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México –CAM SAM- mencionó que cerca del 50% de la población vive en 14 estados de la República Mexicana, por lo que no hay una planeación que aproveche la infraestructura existente, y a pesar de que las ciudades han sido construidas por arquitectos e ingenieros, la participación de estos en la creación de las normatividades es muy baja.

Víctor Ortíz del Colegio de Ingenieros Civiles de México, A.C. –CICM- enfatizó que no hay una planeación a largo plazo, porque sólo se ejecutan planes sexenales que después quedan en el olvido; por ejemplo, en los últimos 10 años, sólo se ha construido una línea del metro y seis de metrobús, cuando se tenían contempladas 10. “Lo ideal es tener un plan a 20 años y que éste se ejecute sin importar los intereses políticos. Por otro lado, hay problemas que son específicos de cada ciudad, pero hay otros que se deberían resolver entre autoridades metropolitanas de varias entidades; por ejemplo, el agua viene del Estado de México, por lo que no es un problema exclusivo del D.F., incluso el problema del transporte no compete a una sola autoridad”.

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Captura de pantalla (396)Al respecto, Arturo Aispuro, moderador del panel, destacó que la planeación y normatividad claras ayudan a identificar las zonas en donde se puede realizar el desarrollo inmobiliario, a veces las preocupaciones sólo se centran en los permisos de construcción para comenzar a ejecutar la obra; sin embargo, la planeación e infraestructura son otras de las barreras con las que se pueden enfrentar los desarrolladores en el ciclo de construcción.

Héctor Ovalle, Presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción –CMIC- DF resaltó que la normatividad está para cumplirse y que las cosas se hagan bien, desde la construcción hasta la operación. A veces parece que hay una sobre regulación, pero se debe cumplir tanto por parte del gobierno como de la iniciativa privada, porque es una responsabilidad de ambas partes. Hay ejemplos de cambios en las normatividades que tienen buena intención, como la creación del Invea, el detalle es que se debe articular el trabajo con las delegaciones, si no vuelve a fallar el sistema.

Por su parte, Felipe de Jesús Gutiérrez, titular de Seduvi, opinó que la ciudad está en un proceso de constante cambio, y la problemática es que con reforma política o no, es necesario hacer un reordenamiento, porque hoy se tienen por lo menos 15 leyes que tienen incidencia sobre el territorio de la ciudad, y que son contradictorias y complejas; además, a pesar de contar con un órgano legislativo desde hace 20 años, a veces hay ocurrencias que se quieren convertir en ley. Hoy se tienen 1 200 leyes de ordenación urbana, lo cual es claramente un exceso.

Captura de pantalla (392)Imaginando la ciudad en 2050, los expertos hablaron de propuestas. El Colegio de Arquitectos, por ejemplo, señaló haber propuesto la creación de la oficina de atención ciudadana en un convenio hecho con Seduvi, para que en conjunto con la ADI y Canadevi se pudieran canalizar todos los trámites relacionados con los permisos de construcción. “La propuesta ha funcionado muy bien; ahora estamos haciendo alianzas con las delegacio
nes para que en conjunto se lleven a cabo las manifestaciones, y así evitar la corrupción, ser eficientes e impedir que los trámites demoren tanto, que los inversionistas se desanimen. El reto es trabajar con las autoridades”.

El presidente del Colegio de Ingenieros Civiles dijo que “la planeación de la infraestructura es muy importante al igual que el aprovechamiento de la ya existente. Hay colonias viejas con infraestructura adecuada,
pero es necesaria una normatividad para hacer una reconversión de esas zonas, sumando los esfuerzos de propietarios, desarrolladores y autoridades”. También, resaltó la importancia de tener peritos certificados para tener la certeza de que las cosas se hagan de manera correcta.

Héctor Ovalle, fue enfático al mencionar que la creación de un Consejo Coordinador Normativo es necesario para tener una conceptualización desde todas las perspectivas. “Lo que ya estamos haciendo son comisiones mixtas para tener un foro de discusión y una capacitación conjunta; así se podrá saber qué esperan de un lado y del otro, pero lo ideal es un cambio de actitud”.

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EL FUTURO DE LAS CIUDADES ESTÁ EN LA RECONVERSIÓN DE ÁREAS INDUSTRIALES

Captura de pantalla (395)La recuperación del espacio público se ha hecho en algunas zonas post industriales; la mayoría de los grandes proyectos urbanos actuales se realizan en sitios que dejaron de ser industriales y están en transformación, destacó el arquitecto Mario Schjetnan, durante la conferencia magistral “Arquitectura y sustentabilidad dentro del desarrollo urbano”, en Expo Inversión Inmobiliaria.

Durante su intervención compartió algunos ejemplos de los proyectos de reconversión industrial donde ha participado, compartiendo los retos y desafíos enfrentados. El bosque de Chapultepec, con sus 686.05 hectáreas, fue un proyecto de rehabilitación que surge a partir de la movilización de grupos sociales, a partir de la cual se conforma una organización tripartita -Consejo Rector Ciudadano, Gobierno Pro Bosque y el Gobierno del Distrito Federal-, acordando rehabilitar el Bosque de Chapultepec. Esta organización lleva 12 años de trabajo continuo.

Se han levantado 450 millones de pesos por parte del sector social-privado con donadores de todo tipo, y el gobierno ha puesto otra parte. Hoy en día, en la segunda sección del Bosque de Chapultepec, se están invirtiendo 1000 millones de pesos y todo el Bosque recibe la visita de 17 millones de visitantes al año.

Otro ejemplo es la Refinería de Azcapotzalco que operó por 70 años hasta 1990, cuando se cierra, para que en el año 2000 se llevara a cabo la transformación. La inauguración fue en 2007. Se tuvo que realizar la remediación de 55 hectáreas, creando un parque con una afluencia de 2.5 millones de visitantes al año. Éste se ubica a menos de un kilómetro de todos los desarrollos que se están haciendo en el Nuevo Polanco.

Tecno Parque es un área de 15 hectáreas que fue una zona industrial –planta de producción de acero y varilla. Se cerró en 1990 y en el año 2004 “participamos con un grupo de arquitectos y desarrolladores en un plan maestro que consistió en crear una serie de edificios que serían call centers y data centers dirigidos a empresas internacionales. Hoy, ahí trabajan 12 500 personas en el área de cibernética y servicios, mientras que cuando era una planta industrial trabajaban de 1500 a 1800 personas”.

Uno de los retos que representó este proyecto fue que las autoridades dijeron que no darían más agua potable de la que usaba la planta industrial, ni tampoco permitirían la descarga de agua pluvial al drenaje, así que la solución fue que los edificios captaran el agua de lluvia, la condujeran a una cisterna y posteriormente se inyectara al subsuelo a 85 metros de profundidad, de tal manera que en una tormenta de una hora, se depositarían 33 litros por segundo en cada uno de los 15 pozos de absorción. Además,  las aguas negras se reciclan en el lugar.

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