En Francia está a punto de finalizar la construcción de la torre Luma Arles diseñada por el arquitecto canadiense-estadounidense Frank Gehry.
Un edificio escultórico de facetas ondulantes sostenidas por una columna vertebral de color piedra, inspirado en los acantilados de los Alpilles. Con una estructura retorcida de revestimiento de aluminio escamoso y cajas de vidrio, ha alcanzado su altura máxima de 56 metros, antes de su apertura en la primavera de este año.
El inmueble comenzó a construirse en 2014 como un centro de arte por iniciativa del coleccionista suizo Maja Hoffmann; y la construcción se llevó a cabo en un patio ferroviario abandonado, una vez propiedad de SNCF, que quedó vacante en 1986.
Hoy en día las fotos revelan la fachada distintiva de la construcción, la cual está compuesta de 11 mil paneles de aluminio dispuestos irregularmente alrededor de su marco de hormigón y acero. Con rendijas de cristal conectan los diferentes niveles y los ladrillos de acero inoxidable captan la variación de la luz. Mientras que, la rotonda de vidrio de 54 m de diámetro que remata la planta baja, recuerda el anfiteatro de Arles, uno de los más bellos monumentos romanos de Francia.
La torre albergará diferentes programas, que incluyen instalaciones de investigación, salas de talleres y seminarios, además de estudios para artistas. El esquema se completará con un parque público, llamado Parc des Ateliers, que ha sido desarrollado por el arquitecto paisajista belga Bureau Bas Smets.
Gehry, es uno de los arquitectos más importantes de la época, galardonado con el Premio Pritzker y reconocido por el Museo Guggenheim Bilbao, proyecto revestido de titanio que abrió en España en 1997. Más recientemente, completó el Louis Vuitton Maison Seoul que presenta una fachada de velas de cristal y propuso una sede similar a un iceberg para Warner Bros en Los Ángeles.