El titular de la Secretaría de Desarrollo Económico, Salomón Chertorivski Woldenberg, presentó el día de ayer la primera entrega de resultados de “ La opinión de la ciudad” programa donde los ciudadanos pueden opinar que es lo que desean que se haga en el terreno que se desocupara con la mudanza del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
El terreno próximo a desocuparse consta de 761 hectáreas, de las cuales 710 se encuentran dentro de la Ciudad de México en la delegación Venustiano Carranza y las restantes dentro del municipio de Nezahualcóyotl, Estado de México. El territorio comprendido de la delegación Venustiano Carranza será propiedad del Gobierno F
ederal pero su utilización dependerá de la reglamentación urbanística de la Ciudad de México.
El secretario afirmaba que desde hace por lo menos tres décadas la mudanza de aeropuertos ha sido un fenómeno cada vez más frecuente en el mundo, esto debido al crecimiento urbano que “se va comiendo a la ciudad”, en ese sentido también afirmaba que el terreno que está por desocuparse podría reconfigurar la Ciudad de México.
Las 710 hectáreas disponibles son equivalentes al territorio total de Ciudad Universitaria o al Bosque de Chapultepec y se encuentra únicamente a 5 km de distancia del centro histórico, pero a pesar de ello el valor de compra es bajo, un aproximado mínimo de siete mil pesos metro cuadrado mientras que el promedio de otras zonas de la ciudad está cercano a los 18 mil pesos.
Según el informe, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México -AICM- si bien es una unidad de negocio- trabajan en él 33, 334 personas- también ha sido a lo largo de los años un factor de empobrecimiento urbano en cuanto a infraestructura social, con una carencia de hospitales – 15 por cada 100 mil personas- y en el caso de escuelas- 130 por cada 100 mil habitantes- aunado al problema crónico de falta abastecimiento de agua que sufre la delegación.
El terreno del actual AICM forma parte de lo que fue el Lago de Texcoco y es de suelo lacustre, se encuentra en una zona de alta fragilidad sísmica, catalogada con nivel de riesgo intermedio en construcciones de más de seis niveles. Otra de las desventajas que enfrenta el terreno es su cercanía con el Bordo Poniente así como la contaminación del suelo generada por el uso de combustibles, lo que limita la construcción de Hospitales.
Respecto a lo anterior el Secretario afirmó que se deben realizar los estudios técnicos del suelo que determinen cuáles son proyectos viables para el terreno. También comentó que cualquier proyecto que se proponga debe contar con las siguientes características:
- que el programa de financiamiento sea autosostenible e independiente
- debe ser un proyecto que considere la sustentabilidad con el ambiente, evite contaminar y priorice el autoabastecimiento de agua
- además de apegarse a las normas urbanísticas que indique el Gobierno de la Ciudad de México