Ir al trabajo en la Ciudad de México debería ser algo tan sencillo como cotidiano, sin embargo, constantemente nos enfrentamos a la realidad de una odisea en el tráfico tan sólo para llegar o salir de la oficina.
La razón de todo este tráfico –el peor del mundo según un estudio reciente- es sencilla: somos muchos. 21 millones de personas habitan la CDMX, convirtiéndola en la quinta ciudad más poblada del mundo, lo cual significa entre otras cosas, que la movilidad sea un asunto complicado. Esto, porque sin importar si utilizas un vehículo propio, taxi o inclusive transporte público, te encuentras con que cada alternativa para llegar a las zonas financieras más importantes de la urbe se encuentra saturada.
Sumado a esta situación nos encontramos con el boom inmobiliario de la ciudad, que a veces crece de manera descontrolada, es decir algunos construyen por construir y sólo contribuyen a una disminución en la calidad de vida de las personas. Sin embargo, existen desarrollos que entienden las problemáticas de la ciudad de manera genuina y que apuestan por romper el status quo a través de un concepto tan obvio como olvidado: bienestar.
Un claro ejemplo de esta mentalidad se hace presente en el corazón de Santa Fe con The Summit, un edificio que plantea una sólida alternativa para las empresas que tienen claro que, si los mercados no son los mismos que antes, sus oficinas tampoco deberían de serlo.
Su primer gran acierto en temas de calidad de vida recae en su ubicación, ya que se encuentra entre dos de las arterias más importantes de la zona: Avenida Santa Fe y Prolongación Paseo de la Reforma. Esto le brinda un doble acceso que hará que entrar y salir de la torre no sea un dolor de cabeza para ninguno de los empleados sin importar la hora y el día.
Esta ubicación no sólo pone foco en los dueños de automóviles, porque reconoce que el caos de la ciudad disminuye a través de las alternativas. Por este motivo, además de contar con las rutas de transporte público que viajan a través de las vialidades antes mencionadas, se encuentra a menos de 500 metros de la estación Santa Fe del próximo Tren Interurbano.
Esto significa que no importa si vienes desde la ciudad o desde Toluca, tu llegada a la oficina podrá evitar por completo el tan odiado “tráfico de Santa Fe”. Este medio rápido y cómodo de transporte dará servicio a 230,000 pasajeros al día y cubrirá un total de 57 kilómetros y 6 estaciones: 2 terminales y 4 intermedias. Sin dudas, se abre un nuevo capítulo en la historia de la movilidad de la zona.
Sumando a una ubicación inmejorable en cuanto accesos, también es fundamental en el día a día, en medio de jornadas intensas de trabajo, encontrar buenas opciones gastronómicas. Por suerte Santa Fe nunca decepciona en este rubro, ya que los restaurantes, cafés y comercios en general se destacan por ser de los mejores en la ciudad, ofreciendo alternativas para todos los días, así como para reuniones ejecutivas y cenas de trabajo formales.
Lo mejor de su ubicación, es que The Summit se encuentra a un costado del pulmón más grande de Santa Fe: el parque La Mexicana. Este espacio de 27 hectáreas (3 veces el tamaño de la Alameda Central) se convirtió en la opción de esparcimiento para todo aquel que se encuentre en esta parte de la ciudad. Con opciones de recreación que van desde un skatepark, hasta un jardín canino, alejarte de la enajenación de la ciudad será tan sencillo como caminar unos pasos.
El segundo gran acierto de The Summit consiste en uno de los aspectos más obvios respecto a lo que nos concierne, la arquitectura. Esto se debe a que desde hace años existe una muy marcada tendencia en cuestiones de recursos humanos, donde el bienestar del empleado, sin importar su lugar en la jerarquía, es la base para una empresa exitosa.
Es por este motivo que las empresas comprenden que un entorno arquitectónico confortable da como resultado trabajadores felices y como consecuencia, resultados positivos y tangibles. Lejos quedaron los tiempos en que las oficinas priorizaban aprovechar el espacio hasta el absurdo con minúsculos cubículos encerrados y dónde las ventanas eran un privilegio para las más altas gerencias.
The Summit fue diseñado con el objetivo de crear las condiciones que den impulso al potencial de todas las personas que trabajen ahí día con día. Esto puede apreciarse en cada uno de los 27 pisos donde el vidrio y la luz natural predominan gracias a su arquitectura triangular de 360o. Además, esta misma disposición triangular nos brinda vistas inigualables desde el primero hasta el último piso sin importar en qué lugar te encuentres.
Además de los beneficios que brinda a tu vida cada espacio de The Summit, en las primeras plantas encontrarás un centro comercial en donde las mejores opciones gastronómicas y de entretenimiento se harán presentes, haciendo del edificio un gran atractivo inclusive en fines de semana.
Finalmente, por lo menos respecto a sus valores arquitectónicos, es importante saber que The Summit cuenta con una pre-certificación LEED (Leadership in Energy and Environmental Design), que lo respalda como una construcción sustentablemente responsable. De esta manera toda la construcción se compromete cien por ciento con el medio ambiente, priorizando siempre la eficiencia energética, el uso de energías alternativas, la mejora de la calidad ambiental interior, la eficiencia del consumo de agua, el desarrollo sostenible de los espacios libres y la selección de materiales eco-responsables.
Para terminar es importante entender el tercer gran acierto de The Summit: su esencia.
El concepto The Summit proviene de su significado en inglés, que nos habla sobre el punto más alto de una montaña, sin embargo, lo que nos transmite va más allá de tocar la cima, nos habla de esfuerzo, de un camino recorrido, de todas las decisiones que has tenido que tomar para llegar a este punto de tu vida.
Por Redacción Inmobiliare
Este es un fragmento del artículo The Summit, una gran noticia para Santa Fe de la edición 112 http://inmobiliare.com/inmobiliare_v2/inmobiliare-112/