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    Remate bancario, una inversión rentable del mercado inmobiliario

    El rendimiento que ofrece adquirir un inmueble a través de un remate bancario es bastante alto. Por este motivo, es uno de los principales modelos de compraventa para los inversionistas que buscan más opciones para su portafolio.

    “Hablamos hasta del 50% del valor de la propiedad, lo que es una inversión bastante redituable”, señaló Grissel Oropeza, Marketing Manager de Wiggot, en entrevista para Inmobiliare.

    Este sistema de adquisición es una mejor opción para quien invierte que para aquellos que necesitan una opción dónde vivir, pues requiere de un tiempo de espera amplio, diferentes procesos legales y papeleo.

    “Hablamos de un activo financiero el cual va a costar, en promedio, alrededor del 50% del valor real en un inicio. Después habrá que gastar en abogados y remodelaciones”, agregó.

    Por esto, va más enfocado a aquellos que tienen mayor experiencia en el sector y buscan ampliar su cartera.

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    ¿Cómo prevenir fraudes al invertir en remates bancarios?

    Para la manager de Wiggot, hay una serie de procesos que los interesados deben seguir para evitar fraudes con terceros.

    Se requiere contar con un equipo de abogados o personas que se dedican al sector, sobre todo con experiencia en este tipo de transacciones.

    “Quienes cuentan con el conocimiento, saben cuándo algo suena raro o si no se está dando la información adecuada o completa. Hay asesores y plataformas que se dedican a ayudar a los inversionistas a comprar remates bancarios”, añadió.

    Además, Grissel Oropeza detalló que existen algunos “focos rojos” que nos podrían decir que el proceso es un fraude.

    En primer lugar, recomendó tener cuidado con los inmuebles que tengan diferentes dueños o que no cuente con un propietario único.

    También es importante revisar que se haya hecho la sucesión de derechos, que se cuente con todos los documentos y estén en orden y revisar los pagos del predio.

    Las instituciones o particulares ponen en remates y a precios muy bajos, en su mayoría, inmuebles con una deuda implacable para ellos.

    “Es importante resaltar que el interesado, en muchos casos, adquiere una deuda y al recibir debe comenzar el proceso de organizar y regular”, puntualizó.

    Finalmente, la especialista comentó que, el único caso en el cual no se puede adquirir o poner una propiedad en remate bancario es que se llegue a un acuerdo de reestructura o bien se liquide en su totalidad.

     

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