Se requieren al menos 380 mil viviendas nuevas por año para satisfacer déficit actual: Canadevi

El sector vivienda es uno de los motores que podrán impulsar la recuperación económica posterior a la crisis sanitaria, debido a sus importantes aportaciones al PIB nacional, así como a la derrama económica y los empleos que genera. Sin embargo, se enfrenta a grandes retos que han provocado una desaceleración en los últimos años, que impiden satisfacer la creciente demanda e inhiben la inversión, principalmente en el centro del país. Esto muestra una clara necesidad de promover acciones conjuntas entre el sector privado y público, que incentiven la construcción de la oferta de vivienda que es requerida, pero con garantías jurídicas y estímulos para la compra. Así lo expusieron los participantes de la conferencia virtual “La industria de la construcción y Vivienda en el Estado de México”, organizada por el Consejo Coordinador Empresarial del Edomex. 

¿Qué representa el sector vivienda para la economía?

Gonzálo Enrique Méndez Dávalos, Presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) explicó que en México, el sector vivienda representa el 6% del PIB nacional, generando 1 billón 327 mil mdp. Del mismo modo, el 47% del empleo que produce el sector de la construcción proviene del área de vivienda, la cual, crea aproximadamente dos millones 467 mil puestos de trabajo, convirtiéndose en la industria que lidera este rubro a nivel nacional. Por otra parte, el 88% de las ramas industriales del país, es decir, 37 de 42, son tocadas por esta actividad económica, añadió. Por ello, el sector vivienda es el tercero más importante después del de manufactura y de comercio, y suma una recaudación fiscal general de más de 77 mil mdp en impuestos federales, y mayor a 114 mil municipales. 

De acuerdo con Méndez Dávalos, los desarrolladores afiliados a la Canadevi, son responsables del 75% de la vivienda formal del país, y de ellos, más del 80% son pequeñas y medianas empresas. Aunado a esto, destacó que durante la pandemia, se ha trabajado en conjunto con los fondos para la vivienda como Infonavit, Fovissste y SHF, para crear esquemas de apoyo que promuevan la compra de vivienda, y respondan a la falta de liquidez e inseguridad laboral que muchos mexicanos enfrentan a causa de la crisis. Detalló, que al generar vivienda, se construyen ciudades sostenibles, y se fomenta el ordenamiento urbano, pues los conjuntos habitacionales requieren diversos servicios de salud, educación, movilidad, etcétera. 

¿Cuáles son los retos y qué se necesita para reactivar el sector?

De manera particular, el Edomex es la segunda economía del país, representa el mayor mercado de consumo; actualmente tiene cerca de 17 millones de habitantes y su crecimiento poblacional será constante por lo menos durante los próximos 30 años. Esto se traduce en un incremento de la necesidad de vivienda, explicó la Presidenta del Consejo Coordinador Empresarial local,  Laura González Hernández. No obstante, existe una innegable caída en la autorización y construcción de vivienda, ya que de 2017 a 2019, se pasó de 136 mil viviendas nuevas a 19 mil 134; y se han construido  83, 815 viviendas menos en los últimos diez años, expuso. 

“Al día de hoy, la producción de vivienda presenta una caída de más del 80% en años recientes, y de continuar esta desaceleración, no sólo se promoverá la irregularidad de la vivienda en su construcción, y en la tenencia de la tierra, sino que frenará el crecimiento de las ramas industriales que forman parte de la cadena productiva de este sector”, afirmó. 

De manera general, México tiene un déficit de 9.2 millones de viviendas, y cada año se realizan únicamente 1 millón de acciones de este tipo, es decir, que si se construyen 250 mil viviendas nuevas anuales, el déficit se irá incrementando, aclaró el Presidente Nacional de la Canadevi. “El resto es realizar de 380 a 500 mil viviendas adecuadas al año, que estén bien ubicadas, sean asequibles y bajo los lineamientos de la Sedatu, lo que les permitirá generar plusvalía permanente”, puntualizó.  

Por su parte, Enrique Téllez Kuenzier, Presidente de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios, dio a conocer que con la pandemia se han perdido cerca de 350 mil empleos directos en el sector, al mismo tiempo que la inversión para vivienda y otros giros inmobiliarios ha venido desacelerando de manera importante desde 2018: en un 45% para la vivienda, y en un 32% para el resto de los sectores. De igual manera, la demanda ha caído en un 30%.

Al respecto, ha identificado siete componentes que son de suma importancia para dinamizar y reactivar la industria de vivienda, y con ello la economía.

1. Se requiere una demanda sólida, y para ello es necesario brindar seguridad laboral, y fortalecer la confianza tanto de los inversionistas como de los consumidores. 
2. Un estado de derecho, cuyos principales habilitadores sean otorgar certeza jurídica respecto a la propiedad de bienes raíces e inversión patrimonial, así como dar claridad y certidumbre en las regulaciones para la autorización de construcción, esto, también coadyuvará al combate a la corrupción y el fortalecimiento de las instituciones. 
3. Acceso al mercado de capital a través de garantías de protección a inversiones a través de protecciones legales contra el incumplimiento de contratos. 
4. Acceso al mercado de deuda, mediante apoyos y financiamientos competitivos otorgados por la banca comercial, la SHF, Infonavit y FOVISSSTE. 
5. En quinto lugar, los permisos y licencias son clave, ya que con una mejora regulatoria y la agilización de los tiempos en los trámites, se facilitará la inversión y el desarrollo de proyectos de vivienda nueva. 
6. La garantía de la provisión de servicios básicos y de la infraestructura necesaria para el desarrollo y operación de los inmuebles es esencial. Además de diseñar programas de planeación de infraestructura en colaboración con los desarrolladores.
7. Finalmente, se requiere de una política gubernamental que esté en mayor coordinación con el sector privado.

Por su parte, González Dávalos reiteró que la demanda de vivienda existe y se impulsa por las tasas bajas y fijas que la banca ha determinado como apoyo ante la crisis, así como la incertidumbre de que los precios de vivienda puedan incrementarse en los próximos años, por lo que las personas toman la decisión de comprar ahora.  Destacó finalmente, que si bien los precios no se ven afectados por la dinámica de oferta y demanda dentro del mismo sector, si se modificarán entre un 5 y 7.5 por ciento al cierre de 2020, debido a la inflación y la depreciación de la moneda.