La Certificación PRIME es un distintivo fundamental para las empresas que buscan destacar por sus prácticas de gobierno corporativo y su preparación para cotizar en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) o Bolsa Institucional de Valores (BIVA).

Con esto, se reconoce a las empresas inmobiliarias que implementan planes estratégicos, según los estándares establecidos en la Guía de Recomendaciones en Gobierno Corporativo, que avalan el compromiso con la transparencia y la ética.  

De acuerdo con Agustín Levy, CEO de Levy Holding, dicho reconocimiento beneficia al momento de intentar acceder a financiamiento competitivo.

“Contar con la estructura y reglamentación adecuada, así como la certificación PRIME, permite destacarse en un mercado altamente competitivo y en constante evolución”. 

El empresario agregó que este título genera mayor confianza por parte de inversionistas, nacionales o internacionales, quienes buscan que sus inversiones estén bien gestionadas y protegidas.

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Dicho reconocimiento beneficia al momento de intentar acceder a financiamiento competitivo.
FOTO: Stelorder

¿Cuáles son los requisitos para acceder a la Certificación PRIME?

La Certificación PRIME tiene como misión principal preparar a las empresas para cotizar en la BMV, asegurando que cumplan con los requisitos necesarios en el rubro de Gobierno Corporativo para la emisión de deuda y la colocación de valores.

Los requisitos necesarios para obtener esta certificación pueden resumirse en los siguientes puntos:

  • Gobierno Corporativo: Cumplir con estándares establecidos por el programa
  • Legalidad: Ser una empresa constituida legalmente en México
  • Viabilidad y rentabilidad: Presentar proyectos viables y rentables
  • Historial crediticio sano: Mantener un historial crediticio limpio
  • Estructura financiera sólida: Contar con una estructura financiera saludable y capacidad de pago
  • Estado legal: No estar en concurso mercantil, suspensión de pagos o insolvencia

Es importante destacar que también ofrece la oportunidad de alinearse con las mejores prácticas internacionales en términos de gobernanza y transparencia.