Paola Tabachnik, fundadora de Co-Madre y CEO de Password, consideró que, los primeros coworking estaban en las mismas zonas que las ciudades destacadas de siempre (por ejemplo, en el caso de Ciudad de México, se ubican en Santa Fe y Polanco), lo cual, con el paso del tiempo trajo problemas.
La empresaria aseguró que, actualmente, los espacios de oficinas se están descentralizando y es una oportunidad increíble para los coworking de nacer en otros lugares, más cerca donde la gente vive.
“Por ejemplo, Montes Urales, que es donde nacimos, hoy es un corredor con edificios vacíos y está lejos de ser lo que era antes. Los coworking ya están más cerca de zonas residenciales dónde pueden dar una mejor calidad de vida y eso los hace mucho más relevantes”.
Detalló que la tendencia se centra en pequeños espacios que descentralizan lo que se conocía como “oficina”, y da la oportunidad de mantener la cultura laboral y espacios físicos flexibles donde puedan interactuar con todos los empleados.
Al respecto, Georgina Ibarra, CEO de Brickwalling, respondió que hay dos opciones, en este sector: aquellas empresas que quieren seguir teniendo a sus empleados en oficinas y aquellas que tenían sedes corporativas muy grandes que se hicieron pequeñas, pues ya cuentan con la flexibilidad de trabajo remoto.
También señaló que, lo que está pasando es una falta de flexibilidad de las empresas para adaptarse a nuevos sistemas con sus empleados.
“No tienen que volver a remodelar o buscar espacios más metros cuadrados para tener sus oficinas centralizadas en una sola zona, sino aprovechar esas opciones de coworking para poder dar la oportunidad de escoger a cada colaborador. Puedes trabajar en un espacio donde tienes todos los espacios adecuados para hacerlo, en diferentes partes de la ciudad, es decir, la que más cerca te quede”.
Ibarra agregó que, en el tema de remodelación de espacios, hay muchos metros cuadrados vacíos en ciudades y corredores importantes y los desarrolladores están buscando reconvertirlos, ya sea en vivienda o coworking o incluso en nuevas propuestas como consultorios.
“Por ejemplo, hay un proyecto en Cancún que nació siendo dos torres de oficinas y una ahora se volvió un lugar de usos mixtos, con centros comerciales, departamentos de lujo y consultorios médicos, principalmente para extranjeros que buscan zonas turísticas como esta”.
Erick Pérez López, fundador de Revo 300, describió que, el coworking, aunque importante, aún es un tema no tan desarrollado como debería a nivel mundial y México muestra un rezago mayor, resaltando incluso que, para ellos, este sector solo representa el 10% del total de sus clientes.
“La reconversión que está pasando en el mercado global aceleró muchos de los procesos que se venían haciendo; sin embargo, estamos en la cuarta revolución industrial y el modelo de oficinas corporativas sigue aquí, aunque nació en el siglo XVII, con la Compañía de las Indias Occidentales en Amsterdam hace 400 años, seguimos metiendo a todos en una sola ubicación. Se escucha raro, pero ya cambiaron muchísimas cosas”.
Por otro lado, destacó que la gentrificación ha hecho que zonas que no eran tan atractivas, hoy están cambiando, por lo que se están haciendo nuevas inversiones interesantes y que otros lugares, donde se concentra un mayor porcentaje de la población, también son buenas opciones para generar oficinas.
“Debemos ver cómo satisfacer la demanda de espacios de trabajo cerca de donde viven las personas, ese es el gran reto que tenemos que cumplir en los próximos cinco años”.
Por su parte, Manuel del Valle, fundador de Homework Coworking, dijo que los desarrolladores se están apoyando mucho de empresas como la que creó, porque se han dado cuenta que los metros cuadrados por sí solos no son suficientes.
“Antes lo que pasaba es que se fijaban en la ubicación y calidad de la construcción; la operación quedaba al último. Ahora, este último elemento pasó a primer nivel y mató a toda la competencia. La ubicación ya no es tan importante como lo era antes de la pandemia”.
El experto recomendó a los desarrolladores que se enfoquen en la operación, pues podrán generar mejores amenidades y enfoque para cada situación.
“También hay que quitar este mito de que los coworking son para gente independiente, eso es un mito, las empresas grandes con miles de colaboradores pueden tener una red con su box central, pero con oficinas distribuidas en diferentes regiones estratégicas“.
Este es un texto de la edición 135 https://inmobiliare.com/inmobiliare-135/