En 2023, el precio de la renta en Tijuana ha incrementado de un 10 al 20 por ciento, estimó la Asociación Mexicana de Profesionistas Inmobiliarios (AMPI).
De acuerdo con el organismo, zonas como El Centro, Río, colonia Madero y Gabilondo son las que muestran los costos más altos. A estas, se han sumado varias otras al este de la ciudad.
“Este incremento se debe, sobre todo, por las nuevas construcciones y centros comerciales. Esto le da plusvalía a la zona y hace que se incrementen las rentas, así como el valor de la propiedad”, detalló Paola Olascoaga, presidenta de la AMPI.
Mexicanos, los más afectados por el aumento de renta en Tijuana
A pesar del incremento, para ciudadanos estadounidenses que viven en Tijuana esto sigue siendo una ventaja, pues no se comparan con los que pagarían en ciudades cercanas, como San Diego.
Los más perjudicados por esta situación son los mexicanos que trabajan en Tijuana, ya que tienen que reunir varios salarios. “Deben tener más de un trabajo y hacer horas extras para poder pagar un alquiler con los precios actuales”, señaló la titular.
Por ejemplo, en colonias como Libertad, se han mostrado incrementos de hasta 360 dólares. Otras colonias destacadas son Hacienda Agua Caliente, Laderas de Mar, Lomas Hipódromo o Residencial Alameda.
Según cifras del portal Propiedades.com, el precio promedio de renta por una casa en Tijuana es de 18 mil 235 pesos por 150 metros cuadrados. Hacienda Agua Caliente fue la que mostró el costo más alto, siendo de hasta 50 mil 227 pesos.
En cambio, en San Diego se encontraron precios promedio de mil 852 dólares (35 mil 124 pesos). En zonas residenciales como Coronado, esta cifra rondó hasta 5 mil 373 dólares mensuales en Forrent.
Vivienda abandonada
Por la falta de vivienda económica, 80% de las viviendas abandonadas en la región Noroeste de México, ya están invadidas, dijo César del Pardo Escalante, dirigente de la Central Unitaria de Vivienda.
Esta situación se muestra mucho en Tijuana, pero también en otras ciudades como Mexicali; Obregón y Hermosillo, en Sonora; y Culiacán, en Sinaloa.
Del Pardo Escalante aseguró que existen 200 mil viviendas sin certeza jurídica en Baja California, mientras que suman cinco millones en el país.
Además, consideró que hay 45 mil demandas de créditos hipotecarios y pese a la promesa del presidente López Obrador, siguen presentándose despojos.
“La problemática de vivienda en Baja California se debe a un sistema especulativo que se conoce como créditos subprime: se pretende que el acreditado pague intereses altos más que liquidar el monto del empréstito, es decir, créditos caros y por largo tiempo”, refirió.
Finalmente, comentó que del total de créditos del Infonavit, 78% son abandonados. “Aun cuando los créditos sean cambiados de Veces al Salario Mínimo (VSM) a pesos, persistirá el abandono de los derechohabientes. Esto es por la alta movilidad de personas que entran y salen de la formalidad laboral”, aseguró.