El Gobierno de España anunció la adquisición de Casa Gomis, una de las joyas más representativas de la arquitectura racionalista y el modernismo catalán.

Se trata de uno de los proyectos más importantes del arquitecto Antonio Bonet Castellana, construido para la familia Gomis Bertrand entre 1957 y 1963. 

La compra se realizó a través del Ministerio de Cultura, la Generalitat de Catalunya y el Ayuntamiento de El Prat, por 7.2 millones de euros (M€). 

Al respecto, el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, indicó que serán estas dependencias quienes definirán el modelo de gestión y el régimen de visitas.

“El objetivo de consolidar la Casa Gomis como un espacio permanente de exploración y un gran centro cultural 100% abierto al público”.

Por su parte, el secretario de Estado del Ministerio de Cultura, Jordi Martí, enfatizó la necesidad de impulsar el edificio como un lugar clave para reflexionar sobre la relación entre arte y naturaleza en un contexto de emergencia climática.

Diseño modular y flexible de la Casa Gomis

El inmueble, también conocido como “La Ricarda”, se ubica a 130 metros de la playa en El Prat de Llobregat, al sur de la ciudad de Barcelona.  

Cuenta con una superficie construida de 900 metros cuadrados y una casa principal que ocupa el solar de manera extensiva, mediante un sistema estructural que se basa en la repetición de un módulo. 

Su diseño permite que cada espacio interior esté asociado a uno exterior, a modo de patio abierto o porche abovedado, así como un interiorismo flexible y con un concepto orgánico.  

Además, contempla una trama de pilares metálicos, de sección muy reducida, formando una retícula de 9 x 9 metros. Sobre éstos, descansa una cubierta abovedada de hormigón armado materializada con teja cerámica.

Cabe destacar que, desde hace algunos años, la propiedad fue abierta para visitas guiadas bajo petición, incluyendo recorridos durante la Bienal  Manifesta 15 Barcelona Metropolitana, donde recibió más de 58 mil visitantes.  

“Este tesoro de la arquitectura racionalista del siglo XX formará parte de nuestro patrimonio público. El objetivo es protegerlo, conservarlo y convertirlo en un gran centro cultural”, afirmó Ernest Urtasun.