La firma japonesa Nikken Sekkei finalizó la construcción de One Za’abeel, el rascacielos con el pasillo voladizo más largo del mundo.
El edificio, ubicado en el distrito financiero central de Dubái, Emiratos Árabes Unidos (EAU), está compuesto por dos torres de 305 y 235 metros, conectadas por un puente horizontal que flota a 100 metros sobre el suelo, nombrado “The Link”.
Dicho punto de conexión cuenta con una plataforma de observación de 230 metros de largo con vistas panorámicas y 66 metros de voladizo.
“Es actualmente el voladizo más largo del mundo, dando a los espectadores la ilusión de estar suspendidos en el aire. También cuenta con una estructura exterior que reduce la torsión y da como resultado un interior sin columnas”, detalló Nikken Sekkei.
De acuerdo con la compañía, será un nuevo punto de entrada a la ciudad y un símbolo del crecimiento y expansión de la ciudad.
Cortesía: Korter
One Za’abeel tiene hotel, espacios comerciales y departamentos de lujo
Los 530 mil metros cuadrados (m2) de One Za’abeel están dedicados a espacios de uso mixto, incluyendo 12 mil m2 de espacio comercial y 26 mil m2 para oficinas. También cuenta con departamentos de lujo, dúplex y áticos de cinco habitaciones, así como restaurantes y un alojamiento hotelero urbano.
El diseño tiene exteriores compuestos por vidrio de baja emisividad, que proporciona transparencia y protección solar a la vez.
“Las aletas de vidrio permiten diferentes expresiones ópticas dependiendo del ángulo de visión. Los patrones de puntos blancos protegen contra la radiación solar y reducen el “efecto espejo”, dando una apariencia tridimensional”.
En la base de One Za’abeel se encuentra el Podium, un complejo de tres pisos que ofrece espacios verdes, parques urbanos y una piscina en el jardín.
Cabe señalar que el proyecto tiene certificación LEED Gold y está en línea con el compromiso de los EAU de alcanzar un objetivo de emisiones.