El trabajo ha sido una de las dimensiones de la vida cotidiana que más se ha modificado durante la crisis sanitaria, motivo por el cual, los entornos que ocupan las empresas requerirán nuevas características que se ajusten a sus modelos de operación. Ante este contexto, los participantes del panel moderado por Lourdes Salinas, Fundadora Three Consultoría Ambiental, hablaron sobre el co-working como una solución eficaz, con la capacidad de acoplarse a las exigencias.
“Creo que las empresas se han dado cuenta de que muchos roles sí se pueden manejar desde el home office, pero que también es necesario un espacio para colaboración que no necesariamente sea específico para cada una, por eso muchas están migrando al co-working”, opinó África Rubio, Directora de Servicios en Sustentabilidad en Cushman & Wakefield México.
Por su parte, Andrés Martínez Sánchez Hidalgo, CEO & Co-Founder de Público Coworking destacó la importancia de la convivencia entre empleados, pues esta influye ampliamente en la eficiencia; explicó que diversos estudios demuestran que a mayor densidad existe mayor productividad, tal es el caso de las ciudades. Y aunque la pandemia ha hecho evidente que el trabajo remoto es altamente funcional, el contacto humano sigue siendo necesario, consideró.
En este sentido, la flexibilidad que ofrecen los co-workings es ideal para fomentar el intercambio de ideas y la creatividad; de este modo, el futuro de estos será híbrido, con diversas alternativas para las empresas, aforos menores y adopción de herramientas tecnológicas para eficientar su utilización, agregó el CEO.
Asimismo, prevé que este modelo tendrá dos usos fundamentales en la nueva normalidad: oficinas satélites independientes a las centrales de las compañías, en las que puedan acudir sus empleados desde diversos puntos de la ciudad; y por otro lado, brindarán los espacios de colaboración para las empresas que reduzcan radicalmente sus metros cuadrados de ocupación.
Fernando Diez, Gerente General de Mercadotecnia en Vitro Vidrio Arquitectónico, apuntó que la percepción de quienes conforman la fuerza laboral ha cambiado y en la actualidad dan mayor importancia a temas como la flexibilidad, creatividad, networking y el bienestar. Así, el diseño y los materiales del interior son esenciales para generar ambientes de trabajo funcionales, cómodos y que incrementen la productividad.
A partir de esto, muchos edificios tendrán que considerar aplicar algunas modificaciones para ofrecer mejores entornos a sus colaboradores. Fernando Diez consideró que se acelerará la adopción de materiales con cualidades tecnológicas como pinturas antivirales, protección acústica para el recubrimiento de muros, filtración del aire, incremento de luz natural, hermeticidad y confort térmico, los cuales, además de generar bienestar también podrían representar una reducción de costos para las empresas.
África Rubio mencionó que otra tendencia que han observado desde C&W es la demanda de desarrollos de usos mixtos, que mezclan co-working, con vivienda, comercio y entretenimiento dentro del mismo inmueble. Respecto al tema de bienestar, sumó que las certificaciones en temas de sustentabilidad y calidad del ambiente interior han tomado mayor relevancia y su demanda ha incrementado considerablemente. Asimismo, planteó que no puede dejarse de lado la inclusión, es decir, diseñar para la accesibilidad de todas las personas.
Por Redacción Inmobiliare
Este es un fragmento de la reseña de EXNI+ https://inmobiliare.com/inmobiliare_v2/inmobiliare-123/