A lo largo de los años, los huertos urbanos han sido relevantes para la producción de alimento en momentos críticos de la humanidad. Sin embargo, con el paso del tiempo estos espacios han resignificado su presencia en las grandes urbes, ya que también proporcionan a la población y al ambiente diversos beneficios.
A través del urbanismo agrario los habitantes de la ciudad tienen la posibilidad de vincularse nuevamente con los ciclos de la tierra y conocer el proceso de crecimiento de sus alimentos.
Esta actividad demuestra que es posible producir cualquier tipo de hortaliza en proporciones de suelo limitadas; lo que contribuye a la soberanía alimentaria y a permitir una mayor acceso a todas las comunidades.
Asimismo, los huertos urbanos impactan positivamente en la salud mental, ya que se han llevado a cabo estudios que demuestran que el contacto con las plantas reduce los niveles de depresión y ansiedad, ayudan a aumentar la concentración, promueve la autonomía y fortalece la autoestima.
Del mismo modo, mejora la salud física, pues al tener acceso a un área verde de calidad las personas pueden practicar algún deporte o realizar actividad física mientras colaboran con el cuidado y desarrollo de estos espacios.
Por otro lado, los huertos urbanos también repercuten directamente en el ambiente, puesto que mitigan las olas de calor, ya que la tierra y las plantas filtran los rayos de sol provocando una regulación de temperatura, en comparación con las grandes extensiones de cemento.
Propician la permanencia y conservación de la fauna y flora de la región. Mejoran la calidad del aire, pues las plantas absorben el dióxido de carbono y producen oxígeno. Promueven la rotación de cultivos y una agricultura libre de pesticidas y, por último, estos espacios reintegran los recursos utilizados a la tierra para crear suelo fértil.
Nuevo proyecto de Construkom y Cultiva Ciudad
De este modo, la desarrolladora de proyectos inmobiliarios, Construkom, en colaboración con la organización socioambiental Cultiva Ciudad, implementaron la instalación de un huerto en el área de juegos de un proyecto residencial ubicado en Yecapixtla, Morelos.
Huertos de San Juan es el primer espacio que integra un área verde de calidad dentro de un espacio lúdico. El espacio, diseñado por la Arquitecta Valerie Auvinet, cuenta con bancas de cultivo y un laberinto donde se sembraron diferentes tipos de hortalizas y hierbas de olor.
El laberinto fue construido con los materiales sobrantes de las residencias. Además, en un costado hay árboles frutales como generadores de sombra y para que en un futuro los habitantes puedan cosechar alimento fresco.
Este es un ejemplo de cómo se puede aprovechar un área destinada al esparcimiento y al juego para que las personas se conecten con la naturaleza y cuenten con una zona que les proporcione bienestar físico y emocional.
Para obtener más información, visite: www.construkom.com
Por: Gabriela Rebolledo Castillo
Este es un artículo de la edición 128 https://inmobiliare.com/inmobiliare_v2/inmobiliare-128/
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