Nuevos corredores de oficinas #exni

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Majestic interior marble stairs from a luxury building covered with red carpet

Las ciudades principales como Guadalajara, Monterrey y Ciudad de México concentran lo más relevante del mercado inmobiliario de oficinas. De acuerdo con Giovanni D’Angostino, de Newmark Grubb Knight Frank, moderador del panel “El mercado comercial y los nuevos corredores de oficinas”, las ubicaciones con mayor entrega de espacios está en los corredores de insurgentes, Reforma y Polanco en CDMX; Monterrey Centro, Valle y Country Valle Oriente; así como Plaza del Sol y Puerta de Hierro en Guadalajara.
De acuerdo con Jorge Enríquez, de Assgard Capital, ellos desarrollan oficinas para dos formatos distintos que son la venta y renta. En la primera pueden ser pisos completos o espacios de 50 metros cuadrados para las empresas pequeñas. En cuanto a la renta, este formato funciona más para empresas de carácter institucional. Hay un proyecto más que se está realizando en Querétaro, donde la idea es convencer a la empresa de sacar sus oficinas de la ciudad y llevar su corporativo así como BackOffice a esta entidad del Bajío.
Aproximadamente el 30% de los usuarios de las oficinas son millenials, por lo que se recomienda a los desarrolladores que tengan espacios abiertos con una potente fuente de internet, independientemente de aprender de los cambios tanto tecnológicos como de los hábitos de los usuarios de este tipo.
Adrián García, de IOS Offices, conoce muy bien el mercado de espacios compartidos y por ello, dice haber tenido un crecimiento importante. Ya están en 10 ciudades de la República Mexicana, con 30 sucursales, cerca de 60,000 metros cuadrados de oficinas instaladas y dando servicio a aproximadamente a 10,000 usuarios, de entre los cuales 6,000 y 7,000 son fijos y el resto móviles.
Salomón Helfon, de Helfon Arquitectos, menciona que su firma tiene 37 años y 20 en el rubro de oficinas corporativas. Al ser una firma de perfil patrimonial, todos los desarrollos participan en los diferentes grupos de inversión, dando cobijo a sus propios inversionistas para lograr el objetivo deseado, que es la formación de patrimonio. Son de las pocas firmas que conceptualizan de manera integral el desarrollo del proyecto arquitectónico de principio a fin. Tienen aproximadamente 240,000 metros cuadrados de espacio rentable.
Salomón Helfon, de Helfon Arquitectos, menciona que su firma tiene 37 años y 20 en el rubro de oficinas corporativas. Al ser una firma de perfil patrimonial, todos los desarrollos participan en los diferentes grupos de inversión, dando cobijo a sus propios inversionistas para lograr el objetivo deseado, que es la formación de patrimonio. Son de las pocas firmas que conceptualizan de manera integral el desarrollo del proyecto arquitectónico de principio a fin. Tienen aproximadamente 240,000 metros cuadrados de espacio rentable.
Juan Andrés Vergara, de VFO Arquitectos, dijo ser una firma fundada en 1993, asociada con un grupo de americanos muy grande que laborando en todo el mundo, llegó a México con el fin de desarrollar edificios de oficinas que pudieran ser atractivos para las empresas internacionales -norteamericanos básicamente. Pero hace siete años se separaron del grupo internacional, para poner la empresa a su nombre. Bajo este nombre, se han logrado introducir proyectos como Punta Santa Fe en la ciudad de México, fortaleciéndose después con presencia en el área de Monterrey y Guadalajara.
Los procesos que se siguen entre una inversión institucional y una patrimonial son diferentes, es por ello que Jorge Enríquez y Salomón Helfon mencionan las diferencias que existen entre una y otra. Jorge Enríquez dice que desde el punto de vista institucional, se busca una oportunidad para convertir terrenos en renta, que a largo plazo se puedan vender, para tener un retorno financiero. Salomón Helfon explica que toda inversión busca utilidad, un retorno atractivo, y al ser una inversión patrimonial, se busca la ubicación, la conceptualización, el diseño, la manufactura del producto y las tecnologías de punta para crear patrimonios con estándares elevados.
Por Alma Beatriz Noriega Otamendi