De acuerdo con un estudio realizado por Lisa Harrington, Presidenta de lharrington Group LLC, en colaboración con DHL, el panorama de los bienes raíces en la cadena de suministro está cambiando debido a la interacción de factores como el comercio electrónico, la globalización y el right-shoring, las fusiones y adquisiciones de empresas y la innovación tecnológica.
El reporte indica que el comercio electrónico no solo ha revolucionado el retail, también todos los sectores de la industria ya que ha cambiado las expectativas de los clientes que “exigen un servicio/entrega casi instantáneo, tiempos de respuesta a los pedidos rápidos y ejecución perfecta, todo al tiempo que tienen plena visibilidad en el proceso”, lo cual pone una carga de presión importante a las cadenas de suministro.
Relacionado con ello el documento indica que los antiguos modelos en los que las empresas globales manufacturaban lejos de sus compradores ha dejado de tener sentido para algunos de los casos por los costos, tiempos de traslado y riesgos “como resultado, las empresas están reestructurando sus redes de producción y suministro, alejándose de las cadenas de suministro de súper-larga distancia hacia cadenas de suministro ‘globalmente locales’. Esto significa que el aprovisionamiento y la fabricación se aproximan a la demanda del cliente en una estrategia que se conoce como ‘right-shoring’”.
Entre las ventajas de este modelo, el estudio destaca la reducción de plazos de entrega, costos de inventario más bajos, mejor servicio a los clientes, mayor agilidad en los procesos, tiempo de recuperación más rápido después de interrupciones en la cadena de suministro y reducción de la huella de carbono, sin embargo “tenemos que equilibrar los ahorros de inventario con el hecho de que el right-shoring suele implicar mayores precios de piezas debido a los mayores costos laborales”.
En cuanto a las fusiones y adquisiciones indica que estas tiene un gran impacto en las estrategias de real estate y las estrategias de operación para las empresas ya que obligan a las cadenas de suministro a combinar y racionalizar sus redes físicas en procesos complejos que pueden durar años. De acuerdo con la información, son las industrias de estilo de vida y cuidado personal en las que más ha habido fusiones en los últimos dos años.
Por otro lado la innovación tecnológica, big data y smart analytics como herramientas estratégicas permiten a las empresas manejar información de semanas o meses por lo que “ahora pueden salir adelante de su negocio y dirigir sus operaciones globales para ser mucho más predictivo y proactivo”, afirma el reporte. Esta tecnología afecta en dos sentidos, según especifica la información, primero ayuda a cambiar o decidir la ubicación de los centros de distribución con mayor certeza, basado en análisis de la a demanda y en segundo lugar puede acelerar la velocidad con la cual las organizaciones responden a los cambios del mercado y los requerimientos de los clientes, por tanto la red de bienes raíces debe ser capaz de flexibilizar y fluir con las nuevas dinámicas.
Por Liz Areli Cervantes