El estudio Espacio 18 Arquitectura diseñó La Casa del Sapo, un proyecto comunitario en la costa de Zapotengo, Oaxaca.
Según el estudio, la casa adopta un enfoque fuertemente contextual con su entorno y se concibe como dos piedras que miran al mar, anhelando su atemporalidad.
La primera piedra, o volumen, busca el amanecer mientras que la otra busca que el sol se ponga.
El espacio entre los dos volúmenes está abierto a la belleza del mar y cuenta con un espacio de vida al aire libre flexible.
Para la construcción se usó el concreto con acentos de madera y celosías. Se eligieron de acuerdo con las habilidades de construcción locales y la disponibilidad de materiales.
Además, buscando proteger su entorno, los materiales escogidos para construir La Casa del Sapo fueron ecológicos y socialmente amigables.
Durante el proceso de construcción, algunos aspectos se dejaron a la decisión de los trabajadores locales, como resultado de la pandemia.
Por esta razón, el proyecto luce más natural y representa a la comunidad, con el fin de conservar, proteger y desarrollar la vida de sus habitantes.
Turistas podrán alquilar La Casa del Sapo
Este espacio funcionará como refugio, espacio inclusivo, casa de reposo y un lugar donde los niños aprenderán diferentes materias.
Además, será posible usarla como casa turística para vacacionar, ya que estará disponible en la plataforma Airbnb por $6,000 la noche, aproximadamente.
Será de 130 metros cuadrados como una respuesta a un clima extremo y al solárium, ya que fue diseñada con proporciones perfectas y la modulación de materiales para sobrellevar las condiciones naturales.