Cepsa y Bio-Oils iniciaron la construcción de la que promete ser la mayor planta de biocombustible de Segunda Generación (2G) en el sur de Europa.

El inmueble se ubicará en el municipio de Palos de la Frontera, provincia de Huelva, España (junto al Parque Energético La Rábida) y representa una inversión conjunta de mil 200 millones de euros.

Al inaugurarse, producirá anualmente 500 mil toneladas de combustible sostenible de aviación (SAF) y diésel renovable (HVO). Sin embargo, el objetivo es duplicar la capacidad de producción actual, hasta alcanzar el millón de toneladas. 

La planta comenzará a producir en 2026 y generará dos mil empleos directos e indirectos durante su construcción y operación.

Planta de biocombustible es necesaria para el crecimiento industrial

En la colocación simbólica de la primera piedra participó el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, y la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, así como Maarten Wetselaar, CEO de Cepsa.

Durante el evento, Moreno Bonilla reiteró que la obra permitirá convertir a Andalucía en la gran productora y distribuidora de energías limpias de Europa. Además, declaro que la construcción es necesaria para hacer frente al crecimiento industrial.

“La planta de biocombustible podrá desempeñar un papel clave en el objetivo irrenunciable de la descarbonización del Planeta. El edificio está incluido en nuestra Unidad Aceleradora de Proyectos, lo que ha permitido tramitarlo en seis meses, un tiempo mínimo, menos de la mitad de lo que normalmente hubiese tardado”.

Por su parte, Teresa Ribera completó que es una gran oportunidad para industrializar y modernizar el tejido productivo europeo.