Parc de l’Alba contará con una inversión pública de alrededor de 450 millones de euros para convertirse en un nuevo barrio.
Recientemente, El Instituto Catalán del Suelo (Incasòl) de la Generalitat y el Ayuntamiento de Cerdanyola del Vallès presentaron el plan urbanístico, que llevaba un tiempo detenido por diversas razones, entre ellas la crisis financiera.
De acuerdo con su información, la construcción del sitio debía haberse comenzado hace más de una década.
Ahora, en las últimas proyecciones se pretende que el macroproyecto albergue cinco mil 700 viviendas, así como distintas actividades económicas.
Entre las que se encuentra, una zona comercial y de retail de 50 mil m2 que ofrecerá sus servicios a los alrededores.
La superficie que abarcará el nuevo barrio es de 400 hectáreas de terreno, de los cuales el 50% será de protección oficial y el restante circundante, 200 hectáreas, se destinará a áreas verdes.
La zona en la que Parc de l’Alba se levantará se encuentra a un lado del Sincotrón, una infraestructura científica de tercera generación, a la cual se añadirán 300 mil m2 para la construcción de un nuevo centro de investigación.
Por esa misma razón, el macroproyecto incluirá una residencia para los estudiantes e investigadores.
Y las viviendas serán de entre 90 m2 y los 120 m2; mientras que los edificios se pretenden que sean desde tres pisos de altura y que no superarán los seis, con el fin de evitar afectar la vista panorámica al castillo de Sant Marçal.
La importancia de macroproyectos urbanísticos como Parc de l’Alba
Se estima que con el nuevo plan urbanístico, se añadirán 15 mil vecinos a los 58 mil residentes actuales del municipio de Cerdanyola del Vallès.
Antes de comenzar las obras de construcción de la zona, el Ayuntamiento debe realizar trabajos para descontaminar los terrenos afectados por la presencia de vertederos incontrolados, lo cual costará 35 millones de euros.
Es por esto que los primeros bloques se levantarán dentro de tres o cuatro años, por lo que el barrio estará listo aproximadamente en 15 años.
Este macroproyecto lleva gestándose más de una década. Ha contado con el tiempo suficiente para plantear con precisión los objetivos y los pasos a seguir para su constitución en una de las ciudades más relevantes del mundo como lo es Barcelona.
Aunque puede verse como un peligro en cuanto a la inversión es el mejor camino hacia la regeneración urbana. A partir de los ejes de sostenibilidad, comunidad y conectividad.
El tema de la planeación urbana a largo plazo es importante porque de esa forma se reconstituyen los barrios tomando en cuenta las principales necesidades de los ciudadanos.