Patrimonio promedio en EE. UU.: qué significa el “millón de dólares” para vivienda e inversión

El patrimonio neto promedio de los hogares en Estados Unidos ronda 1.06 millones de dólares, pero la mediana apenas llega a unos 193 mil. La diferencia la marcan los ultra ricos… y el ladrillo: vivienda, hipoteca y plusvalía. Para desarrolladores e inversionistas, estos números redefinen quién puede comprar, quién seguirá rentando y dónde está el verdadero mercado.

El “americano promedio” no existe

Los últimos datos de la Reserva Federal, analizados por firmas como Kiplinger y GoBankingRates, muestran que el patrimonio neto promedio de los hogares estadounidenses está alrededor de 1.06 millones de dólares, mientras que la mediana ronda los 192–193 mil dólares.

Traducción simple:

  • El número grande (promedio) está inflado por multimillonarios.
  • El número que se parece más a la realidad de la mayoría (mediana) es mucho más bajo.

Por edad, la curva es clara: el patrimonio sube con los años y se concentra en la franja de 55 a 74 años, donde entran las casas pagadas (o casi), las cuentas de retiro y, en menor medida, participaciones empresariales.

La brecha promedio vs mediana: qué hay detrás

Para el negocio inmobiliario, la brecha entre promedio y mediana es más que un tema estadístico; es un mapa de mercado:

  • El “millón de dólares” es real… pero para una minoría.
  • La mayoría de los hogares juega en ligas patrimoniales muy por debajo de ese número.
  • La distribución es desigual: unos pocos concentran la plusvalía, muchos siguen atados a hipotecas, rentas altas o deudas de consumo.

Esto pega directo en tres frentes:

  1. Capacidad de compra de vivienda
    • Con una mediana de ~193 mil dólares, el espacio de maniobra para enganche + costos de cierre no es infinito.
    • El incremento en tasas e hipotecas come una parte importante de ese patrimonio.
  2. Resiliencia ante shocks
    • Hogares con patrimonio bajo y con poca liquidez son más vulnerables a desempleo, subidas de tasas o caídas de precio de la vivienda.
    • Para fondos y desarrolladores, esto se traduce en ciclos de demanda más volátiles.
  3. Segmentación real de la demanda
    • El “cliente de lujo” es un nicho, no el mercado.
    • El grueso de los hogares se mueve entre vivienda middle income, renta institucional y formatos más compactos.

La vivienda como corazón del patrimonio

En EE. UU., la vivienda principal y las cuentas de retiro son los activos que más pesan en el patrimonio de las familias.

Implica:

  • Homeownership = ancla patrimonial Quien compró casa antes de los grandes saltos de precios está sentado sobre plusvalía; quien llega tarde paga ticket alto y se endeuda más.
  • El ciclo de tasas reordena ganadores y perdedores
    • Propietarios con hipoteca fija barata están protegidos.
    • Compradores recientes, con tasas más altas, tienen menos margen y más riesgo si los precios corrigen.
  • Mercado de renta estructuralmente fuerte Si la mediana de patrimonio es baja y la entrada a compra es cara, el alquiler no es transición: se vuelve estado permanente para buena parte de la población.

Para desarrolladores e inversionistas, esto refuerza tesis de:

  • build-to-rent, multifamily institucional,
  • proyectos con tickets alcanzables para clase media alta,
  • y menos fe en el comprador aspiracional que depende de condiciones “perfectas” de crédito.

Lectura para desarrolladores, fondos e inversionistas

  1. No planear producto con el “promedio” inflado Usar 1.06 millones de dólares como referencia conduce a error. El benchmark realista está más cerca de esos ~193 mil de mediana.
  2. Producto asequible bien ubicado > lujo genérico
    • Activos cercanos a empleo, servicios y transporte, con tickets racionales, tienen más profundidad de demanda.
    • El ultra lujo se sostiene, pero es un juego de pocos jugadores, muy expuesto a volatilidad de mercados financieros.
  3. Ingresos, no solo plusvalía Con un patrimonio tan concentrado, los vehículos que generen flujo defensivo (renta, contratos sólidos, inquilinos resilientes) pesan más que las apuestas puras a apreciación de capital.
  4. Mirada desde México y LATAM hacia EE. UU. Para capital latino que compra en Estados Unidos, estos datos cuentan otra historia:
    • En varias ciudades, el inversionista extranjero compite con un comprador local cuyo patrimonio es mucho más limitado.
    • Eso explica por qué ciertos submercados prime parecen “desconectados” del ingreso local: están anclados al bolsillo global, no al vecino promedio.

Qué viene

Si las proyecciones de mayor inversión en IA, reconfiguración industrial y transición energética se cumplen, el patrimonio total puede seguir creciendo… pero no necesariamente de manera equitativa. Y la vivienda seguirá siendo el eje:

  • Donde haya empleo de calidad, habrá presión sobre precios de vivienda y renta.
  • Donde no haya inversión productiva, el patrimonio dependerá cada vez más del ciclo de tasas e inflación.

Para el sector inmobiliario, la conclusión es sencilla pero incómoda:

  • No hay “americano promedio” al que venderle.
  • Hay capas muy distintas de patrimonio y riesgo, y el negocio está en diseñar producto y estrategia de capital para cada una.