Tendencias de viaje 2026: cómo las “Whycations” están redefiniendo la hotelería según Hilton

El informe de tendencias de viaje 2026 de Hilton revela que las “Whycations” y las vacaciones con propósito marcarán el año. Analizamos qué significan estas tendencias de viaje 2026 para hoteles, destinos e inversión en turismo.

Las tendencias de viaje 2026 ya no se explican con la clásica pregunta “¿a dónde vamos?”, sino con una mucho más profunda: “¿por qué vamos?”. Esa es la tesis central del informe global de Hilton, basado en una encuesta a 14 mil viajeros en 14 países —incluido México—, que pone nombre a la nueva ola: Whycations, viajes que arrancan desde el propósito y no desde el mapa.

El estudio muestra que los viajeros priorizan tres ideas fuerza: calma, comodidad y conexión. Detrás están motivaciones emocionales muy claras: descansar de verdad, reconectar con familia y amigos, y vivir experiencias que se sientan significativas, no acumulación de check-ins en redes sociales.

Qué revela Hilton sobre las tendencias de viaje 2026

Hilton cruza encuestas cuantitativas con insights de equipos de hotel y miembros de su programa Hilton Honors. El resultado es un mapa de comportamiento donde la estadía perfecta en 2026 se parece menos a una “vacación maratón” y más a un paréntesis diseñado a la medida del viajero.

Advertisement

En México, los datos son contundentes:

  • Casi la mitad de los viajeros se reserva tiempo a solas antes o después de las vacaciones familiares.
  • Más de la mitad admite que aceptaría un viaje de negocios para desconectarse de su familia o pareja.

En paralelo, el 74 % de los viajeros globales dice que prefiere reservar con marcas que conoce y en las que confía. En un contexto de saturación de oferta, la familiaridad y la coherencia de servicio se convierten en moneda dura.

Para la hotelería, esto implica que el branding y la experiencia consistente pesan tanto como el destino en sí.

“Hoshhhpitalidad”: la calma como nuevo lujo

Una de las ideas más potentes del informe es la llamada “hoshhhpitalidad”: la búsqueda activa de silencio y espacios tranquilos. En 2026, el viaje se vuelve antídoto contra la sobrecarga sensorial de la vida diaria.

Los viajeros de negocios declaran que necesitan momentos a solas: piden cenas privadas después de eventos grupales, prefieren dormir temprano antes que seguir socializando y valoran que el hotel les ayude a marcar esa frontera.

La tecnología se vuelve aliada de esa calma.

Casi tres cuartas partes de los encuestados en el mundo valoran el check-in digital y más de una cuarta parte reconoce que ahora se comunica más con el hotel… pero vía apps y mensajería, buscando respuestas rápidas sin largas interacciones presenciales.

Para los proyectos hoteleros y de hospitalidad, esto se traduce en:

  • Diseñar habitaciones y zonas comunes con islas de tranquilidad reales, no solo marketing.
  • Integrar tecnología de autoservicio que simplifique procesos sin perder calidez.
  • Curar experiencias que permitan estar “juntos pero solos”: espacios compartidos donde la presencia no implique convivencia forzada.

Comodidades del hogar: el viaje como extensión de la vida diaria

Otra de las tendencias de viaje 2026 claras es la búsqueda de familiaridad. Los viajeros quieren sentirse “como en casa”, pero con upgrade.

Más del 80 % de los mexicanos encuestados dice que le reconforta encontrar platos conocidos en los menús, y casi la mitad prefiere preparar alguna comida durante el viaje. A la vez, el 87 % disfruta el “turismo de supermercado”: recorrer tiendas locales para adoptar pequeños rituales cotidianos con sabores nuevos.

La comodidad se extiende a quienes dependen del viajero:

  • 64 % de los dueños de mascotas en el mundo prioriza las necesidades de sus animales al reservar.
  • 80 % de los mexicanos con plantas piensa en quién las va a regar antes de definir fechas.

Y, al mismo tiempo, el 75 % de los viajeros mexicanos quiere aprovechar sus días libres para explorar un hobby o pasión personal; casi el 60 % estaría dispuesto a desconectarse por completo para viajar durante meses o años. El mensaje es claro: quieren mezclar confort, cuidado de su entorno afectivo y crecimiento personal.

Para el desarrollo hotelero y de alojamiento, esto abre espacio a:

  • Habitaciones y suites preparadas para estancias más largas: cocinetas, espacios de trabajo, áreas flexibles.
  • Políticas pet-friendly y servicios asociados (amenities, áreas designadas, aliados de cuidado).
  • Programas que integren actividades alrededor de hobbies: bienestar, deporte, gastronomía, arte o aprendizaje.

Vacaciones familiares: más voces, más generaciones

El informe también retrata un cambio interesante en la lógica de las vacaciones familiares. Los niños dejan de ser espectadores y pasan a ser co-diseñadores del viaje.

El 85 % de los mexicanos que viajan con hijos o nietos quiere que los niños ayuden a planear las vacaciones, y el 88 % reconoce que los pequeños los inspiran a probar cosas nuevas.

A esto se suma el auge de las vacaciones que saltean generaciones: casi un 30 % de los viajeros con niños está enviando a los hijos de viaje solo con los abuelos. Y la mitad de los padres con varios hijos organiza viajes “uno a uno” para construir momentos exclusivos con cada uno.

Al mismo tiempo, 93 % de los viajeros mexicanos dice que buscará momentos de juego en familia y más del 60 % planea periodos sin pantallas para mantener a todos activos y conectados.

Para hoteles, resorts y destinos, el mensaje es doble:

  • Hay que diseñar productos y experiencias pensadas para distintos grupos familiares y combinaciones de edades.
  • Los espacios lúdicos y las actividades desconectadas de las pantallas ya no son “nice to have”, son parte del valor central.

Turismo hereditario: cómo viaja una generación influye en la siguiente

Hilton también habla de “turismo hereditario”: la forma en que las decisiones de viaje de una familia se heredan entre generaciones.

Dos tercios de los viajeros del estudio aseguran que sus padres influyeron en la elección de hotel; casi 60 % reconoce que también determinaron qué programas de lealtad usan. Tres cuartas partes dicen que su estilo de viaje está marcado por lo vivido con su familia.

Los datos muestran además que muchas familias siguen viajando con al menos un hijo adulto… y que, en la mayoría de los casos, los padres siguen pagando. Solo 11 % de los hijos adultos cubre totalmente su propio viaje.

En México, cerca del 80 % de las familias busca experiencias que los conecten con tradiciones locales y más del 60 % planifica viajes para conocer sus raíces. Ahí está una enorme oportunidad para destinos y operadores que puedan ofrecer producto ligado a cultura, historia y genealogía.

Qué significa todo esto para la industria de viajes y hospitalidad

Si juntamos todas las piezas, las tendencias de viaje 2026 dibujan un consumidor que:

  • Viaja menos por impulso y más por intención.
  • Espera que el hotel combine silencio, control, comodidad y opciones de conexión auténtica.
  • Lleva su vida consigo: rutinas, afectos, mascotas, hobbies.
  • Diseña los viajes en familia como experiencias compartidas, no solo decisiones de los adultos.
  • Construye lealtad a largo plazo con marcas que le dieron confianza desde temprano.

Para cadenas hoteleras, operadores independientes, inversores y desarrolladores, la lectura es directa: el producto que solo promete cama y ubicación se queda corto. El valor real va a estar en traducir esos “por qués” —descansar, reconectar, crecer, pertenecer— en espacios, servicios y narrativas concretas.

En esa nueva era de las Whycations, competir ya no es llenar habitaciones, sino diseñar razones poderosas para que la gente quiera viajar… y volver.

Advertisement