Samsung Electronics se encuentra cerca de confirmar su plan para construir una nueva planta de fabricación de chips en el estado de Texas.
Dicho desarrollo estaría instalado en el condado de Williamson y tendría una inversión aproximada de 17 mil millones de dólares.
Sin embargo, la empresa continúa el análisis de múltiples ubicaciones y aún no ha tomado una decisión, según informó la plataforma Reuters.
Samsung detalló en documentos presentados a funcionarios estatales previamente, que la nueva planta tendría una extensión de 557 mil 418 metros cuadrados.
El plan de la empresa es iniciar las obras de construcción en enero de 2022, para una entrada en operaciones a finales de 2024.
El objetivo sería la fabricación de chips de lógica avanzada y se prevé que genere cerca de mil 800 puestos de trabajo.
Ofrecen beneficios fiscales a Samsung en Texas
Aunque las fuentes de Reuters pidieron no ser identificadas, aseguraron que se encuentran autorizadas para adelantar que el suburbio de Austin, en el condado de Williamson, tiene una ventaja en la decisión final.
No se revelaron más detalles, pero aclararon que esta región se ha destacado por los subsidios que ofrece, así como por sus fuentes estables de agua y electricidad.
Otro de los competidores en Texas para obtener la nueva planta de Samsung es la ciudad de Taylor. Quien a principios de este mes publicó que ofrece beneficios fiscales para el terreno de la construcción.
La propuesta consiste en un subsidio equivalente al 92.5% del impuesto a la propiedad con tasa a 10 años, y de 85% en el futuro.
Asimismo, considera una exención de impuestos del 92.5% sobre la nueva propiedad por 10 años y el reembolso de los costos de revisión del desarrollo.
Con este proyecto, la empresa surcoreana busca diversificar su mercado, pues de acuerdo con Park Sung-soon, analista de Cape Investment Securities “con Estados Unidos convirtiendo los semiconductores en un material estratégico, es un riesgo concentrarse sólo en Asia”.