El Día del Arquitecto, el cuál se celebra en México cada 1 de octubre, surgió como una fecha para reflexionar sobre el papel crucial de esta disciplina en la configuración de la vida urbana moderna. 

Para Levy Holding y Diagrama Arquitectos, la necesidad de contar con expertos que sepan diseñar espacios habitables y sostenibles, cobra una importancia vital al considerar que, a nivel mundial, 55% de la población reside en ciudades. Además, se proyecta que para 2050 esta cifra ascenderá al 68 por ciento.

“En México, la arquitectura es más que un oficio; es una fuerza impulsora de la transformación urbana y social. Durante el 2T2024, la fuerza laboral de arquitectos, planificadores urbanos y del transporte en el país ascendió a 145 mil elementos”. 

Para ambas firmas, esto refleja el auge de una disciplina que enfrenta el desafío de moldear el futuro de nuestras ciudades. 

Arquitectura, disciplina que impacta en la calidad de vida

Alan Valadez, director de Diagrama Arquitectos, subrayó que la arquitectura no solo construye edificios, sino experiencias que impactan profundamente en la calidad de vida de sus habitantes.

“La arquitectura es mucho más que la creación de estructuras; es una herramienta para diseñar experiencias humanas. Cada espacio que concebimos tiene el potencial de influir en el bienestar y transformar la vida de quienes lo ocupan“, compartió Valadez. 

Sobre esto, resaltó que en un contexto de rápida urbanización, el rol del arquitecto se vuelve aún más crítico. “El crecimiento acelerado plantea una serie de desafíos que demandan soluciones creativas y sostenibles”.

El experto añadió que en ciudades como Guadalajara, donde la densificación urbana es evidente, el aprovechamiento eficiente del espacio es esencial. 

“El reto no es solo construir más, sino hacerlo de manera inteligente, pensando en cómo los espacios pueden evolucionar con el tiempo. Debemos responder a las necesidades cambiantes de sus usuarios”, indicó.

Sostenibilidad: obligación para cualquier arquitecto

Según el ejecutivo de Diagrama, la arquitectura contemporánea ha evolucionado hacia un enfoque multifuncional y adaptable. Esto permite a los espacios ser flexibles, dinámicos y acoger distintos usos,  no solo optimizando el entorno urbano, sino favoreciendo la cohesión social. 

“Los edificios ya no pueden verse como entidades aisladas; deben integrarse en el tejido social de las ciudades y fomentar la interacción entre las personas”, señaló.

Finalmente, enfatizó que un componente esencial en la práctica arquitectónica moderna es la sostenibilidad pues hoy, más arquitectos son conscientes de que los materiales y métodos que eligen tendrán un impacto directo en el futuro.

“La sostenibilidad ya no es una opción, sino una obligación. Diseñar edificios energéticamente eficientes es nuestra manera de contribuir a un mundo más responsable”.