De acuerdo con cifras de Newmark Central America, el mercado de oficinas de Costa Rica se adapta y recupera tras la pandemia de forma estable.
Ejemplo de ello es la construcción de 12 proyectos de oficinas clase A en el Área Metropolitana, con obras como:
- Sabana Corporate Center – Campus One Roche
- La Ribera Business Hub Edificio A
- Atmos Campus de Negocios
Aun así, la empresa de bienes raíces informó que en el 1T2022, la oferta corporativa se mantuvo con una tasa de disponibilidad de 21.5 por ciento.
Esto fue resultado del desequilibrio generado por la cuarentena, el cierre de negocios y los cambios en los modelos de trabajo tradicionales.
A pesar de esto, “las señales de recuperación son alentadoras y el sector continúa adaptándose a los esquemas híbridos de trabajo”, señaló la empresa.
Demanda de Mercado de oficinas de Costa Rica se mantendrá en 2022
Con respecto al tema de la demanda de este sector, Danny Quirós, director de investigación de Newmark, aseguró que incrementará de manera lenta, pero segura en 2022.
Con respecto a niveles de Inversión Extranjera Directa del país, el directivo indicó que se habrá una recuperación, lo que beneficia a los requerimientos de mudanza y expansión de firmas.
Para marzo de 2022, el inventario de oficinas se estableció en dos millones 412 mil 559 metros cuadrados (m2) de área arrendable total. Esto significó una cifra 0.26% mayor respecto al mismo período en 2021.
Dicho crecimiento trimestral corresponde a nuevos desarrollos clase A en los sectores de San José Oeste y Heredia.
“Para el resto del 2022, el inventario mostrará un mayor crecimiento con la entrega de nuevos inmuebles en la categoría A”, apuntó Quirós.
Inquilinos buscan mejores servicios y amenidades
Newmark reportó un marcado interés de los inquilinos por ubicarse en oficinas con mayor flexibilidad. Tras un estudio, determinó que los clientes buscan.
- Capacidad de reducción
- Ampliación de espacios conforme a sus necesidades
- Espacios con mayor eficiencia
- Amenidades
Además, los elementos de bienestar que permitan un retorno seguro para los colaboradores fueron de los más solicitados.
Los inmuebles de segunda generación (clases B y C) son los que más han invertido en mejoras de este tipo. También han implementado el modelo plug and play para mejorar su posición de mercado.
En cuanto a los precios, estos parecen estar regulados por las condiciones de entrega y la capacidad de los propietarios para invertir en mejoras.
En el periodo en estudio, los precios de lista llegaron a $17.90 mientras los de cierre (luego de negociaciones) fueron de $16.82.
Otro elemento que tiene un efecto significativo son los espacios recién construidos, o en la fase final de construcción.
“Ambos elementos han generado una ampliación en los rangos de precios de cierre presentes en la actualidad” comentó Danny Quirós.