El sistema de captación de agua de lluvia (SCALL) consiste en el desarrollo de una técnica que permita interceptar, recolectar y almacenar este líquido vital.
La temporada de lluvias abarca desde mayo hasta septiembre, variando de región en región, y suele ser caótica en algunas partes de la República.
Las afectaciones incluyen automóviles registrados como pérdidas totales y trascienden lo material cuando dañan bienes inmuebles y dejan a personas sin vivienda.
Sin embargo, estas inundaciones no solo responden a las fuertes lluvias, sino también a factores como la falta de infraestructura, basura en las calles, exceso de cemento y escasez de árboles.
Las ciudades deben comenzar a aprovechar los beneficios que puede tener esta temporada, tal y como lo hacen más comúnmente en zonas rurales, y el sistema de captación es la vía más evidente.
Un sistema de captación de agua consiste de tres fases:
- Separación: se busca retirar cualquier sedimento, basura, grasas y otros elementos que se encuentren en el agua.
- Filtrado: en esta segunda etapa se utilizan filtros de Zeolita, Carbón Activado o Perlita, dependiendo las condiciones de la región, para limpiar el agua de cualquier contaminante químico, metal y materia orgánica.
- Almacenamiento: finalmente, el líquido se guarda en un lugar donde no esté expuesta al sol, para evitar la reproducción de microorganismos, y se almacena tapada hasta por dos meses.
Beneficios del sistema de recolección de agua de lluvia
El primer beneficio del SCALL es el ahorro del agua potable, ya que se disminuiría la demanda al reutilizar el agua pluvial para los sistemas no esenciales como: limpieza, uso doméstico, en W.C, e incluso en procesos industriales.
La jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, mencionó que el Valle de México se encuentra en condición de sequía por los bajos niveles de agua en las presas. Por lo tanto, hay alcaldías donde se han sufrido los recortes en el suministro de agua.
En estos lugares la situación cambiaría drásticamente, sí se contará con algún tipo de sistema de captación.
“Por esta razón, es importante que el gobierno en conjunto con los organismos privados generen alternativas para llevar a cabo este tipo de instalaciones que terminarán por beneficiar a toda la población”, dijo el Ing. Manuel Salas, director general de CIPRO.
En ocasiones no se vislumbra que si hay agua e infraestructura bien planeada en la ciudad, esto aportará a la industria y al mismo desarrollo urbano. Si existe una óptima red de infraestructura hídrica, habrá también un interés por invertir en esa región.
El SCALL tiene como resultado múltiples beneficios ecológicos y para el crecimiento económico que no se están aprovechando, quizá por desconocimiento. Sin embargo, empresas como CIPRO, están dedicando cada vez más sus esfuerzos hacia la innovación en los sectores de agua y energía.
También, es indispensable “un uso más inteligente del agua y es oportuno que sea parte de los reglamentos de construcción tanto en la CDMX como en el país”, mencionó el Ing. Manuel Salas, director general de CIPRO.