El retail y la vivienda, dos sectores aparentemente distantes, están íntimamente conectados, mediante una red que los relaciona y que impulsa el crecimiento de las comunidades. Existen diversas facetas de esta relación dinámica, desde el impacto en el desarrollo urbano, las tendencias del mercado y la calidad de vida de las personas.

Hay que considerar que el retail es un motor del desarrollo urbano, lo que implica una atracción de residentes y nuevos negocios, ya que se ofrecen opciones de compra, entretenimiento y servicios lo que a su vez estimula positivamente la demanda de vivienda. Otro aspecto a considerar es la modernización o actualización de las colonias, esto abarca una mejora en los servicios e incluso una mayor seguridad. La oportunidad de empleo para los residentes de la zona es sustancial, se crean oportunidades en los sectores de la construcción, logística, transporte, personal operativo de las tiendas y más, lo que genera un impulso social y económico relevante.

Abordando el tema económico, el desempeño del retail podría reflejar estabilidad económica de la zona, lo que a su vez indicaría una mayor demanda de vivienda e impulsaría los precios de las propiedades regresando al principio básico de la oferta y la demanda. En torno a este debate, la presencia de un retail atractivo en un vecindario puede aumentar el valor de las propiedades circundantes, lo que beneficia a los propietarios de viviendas, lo importante es mantener el rango promedio, asegurándose por expertos y no cometer abusos generando una burbuja o especulación innecesaria.

Las preferencias de vivienda han ido evolucionando, hoy es posible observar en el mercado mexicano diversos tipos o tendencias en materia de vivienda. Uno que cobija a ambos sectores es el de Usos Mixtos. En ese punto, los desarrolladores han encontrado una gran área de oportunidad para generar espacios acorde a la demanda, sin embargo el gran reto que aún existe y permanecerá, es la disponibilidad de tierra así como la densidad de las edificaciones fuera de avenidas principales.

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Foto: Cortesía

Es importante mantener la resiliencia y la escucha continua del mercado, así como el conocimiento de las necesidades, esto llevará a tener una adaptación eficiente, sobresalir y colocar de manera exitosa un portafolio inmobiliario, en todo momento apalancándose de tecnología.

Uno de los principales objetivos o premisas es ver al retail como complemento de la experiencia residencial, es decir, brindar acceso a servicios y comodidades que beneficien el día a día, desde la proximidad a tiendas minoristas, restaurantes, centros de entretenimiento, son elementos que suman y mejoran la calidad de vida de los residentes. Además, la creación de centros comerciales e incluso las mismas zonas aledañas, se convierten en espacios comunitarios o locales donde se fomenta la interacción y esparcimiento de los habitantes.

Hablando de los desafíos y oportunidades entre ambas industrias, sin duda, una de las principales, es la competencia por la disponibilidad de espacios, ya que su demanda podría generar un conflicto entre ambos sectores encareciendo aún más la poca tierra disponible. Es viable y ya existen soluciones que albergan lo mejor de los dos mundos, solo hay que alinear voluntades y cooperar entre el sector público y privado para conseguirlo.

En temas de medio ambiente, el retail con un desarrollo excesivo provoca un aumento en la congestión vehicular, contaminación y el consumo de recursos. De igual forma los hábitos de compra de manera electrónica presentan retos interesantes para el retail, sin embargo, todo es viable si se realiza con planeación y pensando en la sustentabilidad y funcionalidad de cada sector.

Si bien, la visión hacia el futuro para la correcta convivencia entre ambas industrias se encuentra en la verticalización en conjunto con los Usos Mixtos, al combinar vivienda, tiendas y espacios comerciales; se continuarán creando comunidades más sanas, con esparcimiento y que podrían subsanar en lo consecuente el déficit de vivienda actual que existe en algunas zonas del país, por ejemplo la CDMX.

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En específico, el retail tiene que continuar abordando las experiencias de compra personalizadas y con una oferta de valor que subsane la exigencia del consumidor, utilizando tecnología y análisis de datos para anticiparse y satisfacer la demanda de los consumidores. Esto debe de ir de la mano con la sostenibilidad energética, el cuidado al medio ambiente es algo que se privilegiará y los inmuebles actuales o ya edificados tienen que adoptar nuevas medidas que cuiden los recursos naturales.

La relación entre el retail y los bienes raíces habitacionales es compleja y multifacética, con un impacto significativo en el desarrollo urbano, las tendencias del mercado y la calidad de vida de la sociedad. Al comprender esta interdependencia, los desarrolladores inmobiliarios, los planificadores urbanos y los líderes empresariales pueden tomar decisiones informadas que promuevan el bienestar de las comunidades llevándolas a la prosperidad.

Es importante destacar que esta relación está en constante evolución, adaptándose a las nuevas tecnologías, las tendencias existentes y las preocupaciones ambientales. La clave para el éxito radica en encontrar un equilibrio entre las necesidades del retail y las aspiraciones de en materia de vivienda, creando entornos que beneficien tanto a los residentes como a los negocios.

POR JORGE COMBE, CEO DE DD360

*Nota del editor: Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Inmobiliare.

Es un texto de la edición 145 de la revista Inmobiliare