Se crea un plan de recuperación de vivienda abandonada, con el cual Infonavit pretende recuperar y vender 100 mil 345 unidades en los próximos cuatro años. Esto sería el 15.4 % del total de viviendas en esta situación en México, cifra que asciende a 650 mil.

De acuerdo con Carlos Martínez, director del instituto, el plan es recuperar ese volumen hacía el 2024, para lo que se instalarán los servicios faltantes en los desarrollos. Esta sería una apuesta complicada dadas las razones por las que fueron abandonadas estas casas: falta de servicios, inseguridad, mala calidad de los materiales, lejanía de las fuentes de empleo, entre otras.

“Eran viviendas alejadas de los centros de trabajo y los conjuntos habitacionales se volvieron ciudades dormitorio donde los costos para trasladarse incluso eran mayores al pago de una hipoteca”, explica Martínez. Lo anterior ocasionó que miles de viviendas hoy estén en el abandono, pese a un déficit de 9.2 millones que tiene el país.

Informó que 57.7% de las viviendas a recuperar se encuentran en la Ciudad de México que concentra 14 mil 982 unidades; Tamaulipas, con 14 mil 386; Nuevo León, 11 mil 21; Estado de México con 9 mil 67; y, Chihuahua con 8 mil 280 casas. Estos inmuebles pertenecen al Infonavit luego de ser recuperadas mediante procesos judiciales iniciados en administraciones pasadas ante el impago de los trabajadores.

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Para lograr el objetivo, el instituto, en conjunto con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), creará planes para cada conjunto habitacional en los que se establezcan los servicios a instalar. Además, se firmarán convenios con los municipios para que se comprometan a instalar los servicios faltantes y evaluar si se tiene que modificar el uso del suelo, ya que algunos no son habitacionales.

“Porque recuperar viviendas, no solo es pintar casas, equiparlas, sino se tiene que trabajar necesariamente con el municipio con una supervisión urbana”, enfatizó. A partir de este año, las viviendas recuperadas podrán ser vendidas directamente a los derechohabientes interesados.

Entre 2000 y 2012 se dio el periodo de expansión de la vivienda social, el cual se basó en subsidios federales para las desarrolladoras, con la intención de brindar vivienda a la mayor cantidad de personas. Pero la estrategia fue incorrecta porque primero se construyeron casas, sin antes detonar fuentes de empleo en estos lugares, consideró Ilan Eskenazi, investigador del TEC de Monterrey.

Se recordará que, durante el sexenio de Vicente Fox, de 2000 a 2006, el Infonavit concedió 1 millón 884 mil créditos y con Calderón, de 2007 a 2012, fueron 2 millones 955 mil. Fue entre 2005 y 2012 que se disparó en 107.3% el total de viviendas abandonadas al pasar de 69 mil a más de 144 mil, de acuerdo con la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF).