El nuevo Hotel RIU Riviera Cancún con 530 habitaciones no ha podido operar debido a que han tenido problemas legales con el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (FONATUR), quienes se han opuesto al proyecto desde 2019, ya que el sistema para tratamiento de aguas negras de Cancún está rebasado, no alcanza puede procesar la cantidad de litros que se contaminan y menos aún con este nuevo resort.
Desde el inicio de las obras, la cadena hotelera no ha cumplido con las condiciones ambientales exigidas por el órgano gubernamental. La falla legal de RIU es que el grupo se comprometió con FONATUR a través de un contrato a pagar la ampliación de El Rey, la planta de tratamiento de aguas residuales, lo cual costaría 60 millones de pesos.
“RIU ha incumplido con el convenio que se celebró el 9 de octubre del 2015, con el Fondo Nacional de Fomento al Turismo y FONATUR Mantenimiento, así como a sus diversas prórrogas autorizadas mediante oficios de 23 de septiembre y 2 de diciembre de 2016”, decretó el órgano gubernamental a través de un comunicado.
FONATUR está convencido de que el hotel es un riesgo para la naturaleza local, ya que está muy cerca del Área Natural Protegida Manglares de Nichupté y, sin un sistema de agua negra se terminará por contaminar y extraer agua en cantidades insostenibles. Ante esto, el Juzgado Quinto de Distrito está revisando el caso y FONATUR amparándose para que el proyecto se suspenda definitivamente.